Martin suspiró, se terminó de arreglar la ropa frente al espejo y salió a escena.
Los aplausos retumbaron en sus oídos, y cada día estaba más seguro de que su futuro estaba ahí, sobre un escenario. Amaba lo que hacía, amaba sentirse visto. A lo lejos, divisó a sus amigos entre el público, pero solo pudo verlo a él: Juanjo, levantado, con los ojos brillantes, aplaudiendo con efusividad.
Quería lanzarse a sus brazos y que este lo llenara de besos, quería contarle cómo se sentía mientras comían palomitas, como solían hacer antes.
Al volver entre bastidores y ponerse su ropa, lo vio reflejado en el espejo y pensó que, con toda la emoción, estaba empezando a alucinar.
—Qué artista eres, Martin —se acercó lentamente Juanjo, como buscando su aprobación.
Martin se giró para mirarlo de frente—. Gracias, Juanjo —sonrió sincero.
—Fuiste el mejor ahí, sin duda alguna —continuó Juanjo, dando un paso más.
Martin quería gritar y colgarse de su cuello, decirle que lo amaba y que solo necesitaba tenerlo ahí para completar su felicidad.
—¡The best actor forever! —Kiki, junto al resto de sus amigos, interrumpió su momento a solas.
—¡Qué bueno eres, Martin! —gritó Bea, abrazándolo con felicidad—. Toma —le entregó sus flores favoritas.
Martin abrió la boca asombrado. Siempre había visto en las películas que los actores de teatro recibían flores en sus estrenos, pero nunca pensó que le pasaría a él.
—¿Y esto? —las recibió emocionado.
Bea se encogió de hombros—. Me la mandaron al piso, solo decía "para Martin en su día" de Anónimo. Tiene una tarjeta, pero no la leí —explicó.
El vasco no pudo evitar mirar a Juanjo, imaginando por un momento que sería él quien las mandó. Cogio la tarjeta y la guardo en su abrigo para leerla cuando esté a solas.
Ruslana y Álvaro se acercaron a abrazarlo y llenarlo de felicitaciones, comentando sobre la obra que acababan de ver.
—Con razón te mantienes en línea, amor —Álvaro acarició su brazo.
—Bueno, Marts, ¿vamos al piso, no? —Ruslana entrelazó sus brazos y juntos caminaron hacia los coches de sus amigos.
𓇢𓆸𓇢𓆸𓇢𓆸
—Wow —soltó sorprendido el vasco al ver cómo habían decorado su piso.
"Felicidades, Actor"
Y una mesa decorada con mucha comida encima.
—Bueno, tal vez nosotros nos olvidamos de comprarte flores, ¡pero te hicimos una sorpresa! —gritó Ruslana con emoción.
—¿Quién hizo esto? Me encanta —los miró enternecido. Cogió un canapé y sintió tener un orgasmo de lo bueno que estaba. Apenas dio un mordisco, supo enseguida quién lo había hecho.
—Juanjo estuvo aquí toda la tarde y nos ayudó a cocinar —explicó Kiki con ternura—. Y pues decoramos junto a Bea y Alvi.
—Ay, chicos —se acercó a tener un abrazo grupal, entrelazando su mirada solo con el maño—. Sois los mejores amigos que pude tener.
El sonido de una llamada entrante lo sorprendió. Se acercó a contestar.
—¿Martin? ¿Tardarás mucho? Estoy en el restaurante ya, no quería perder la reserva... —Víctor respondía desde la otra línea, haciendo a Martin abrir la boca recordando.
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No Puedes Gustarme
FanfictionJuanjo siempre había creído que no estaba hecho para las relaciones serias, y su mejor amigo estaba convencido de que esto se debía a que nunca había considerado la posibilidad de estar con hombres. Esta afirmación, que comenzó como una broma, ocult...