Madison y Vincent son estudiantes de instituto cuyos caminos se cruzan de manera inesperada. Madison, una chica sencilla y amable, se enamora de Vincent, el chico rebelde y popular del colegio. Lo que Madison no sabe es que su relación con Vincent f...
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Los días pasaban volando y ya estábamos en octubre. Mi relación con Vinnie había comenzado a hacerse más sólida y ambos pasábamos por lo menos una tarde juntos cada semana. Los amigos de Vinnie habían dejado de burlarse de mí, pero Julia seguía intentando dejarme mal siempre que podía.
Era jueves, y hoy iba a quedar con Vinnie para dar una vuelta por el parque. Me iba a enseñar a andar en monopatín. Estaba emocionada y nerviosa al mismo tiempo. Durante el recreo, Chloe me encontró en la cafetería.
—¡Madison! —dijo Chloe mientras se acercaba— ¿Quieres ir al centro comercial después de clases? Vi que hay ofertas en algunas tiendas y podríamos ver una película.
La miré, un poco apenada.
—Lo siento, Chloe. Hoy quedé con Vinnie. Me va a enseñar a andar en monopatín.
Chloe frunció el ceño, claramente molesta.
—No entiendo por qué pasas tanto tiempo con él, Maddie. Es el mismo chico que se ha burlado de ti a más no poder todos estos años.
Suspiré, sabiendo que esto vendría eventualmente.
—Ha cambiado, Chloe. Es diferente cuando estamos solos. Me trata bien y me hace sentir especial —dije, intentando que entendiera.
—¿Diferente? —repitió Chloe, con incredulidad— Maddie, la gente no cambia tan fácilmente. ¿Qué tal si solo está jugando contigo?
—No lo creo, Chloe —dije, tratando de mantener la calma— Sé que parece increíble, pero me ha demostrado que es una mejor persona de lo que todos piensan.
Chloe sacudió la cabeza, frustrada.
—Espero que tengas razón, Maddie. Solo no quiero verte herida de nuevo.
Asentí, sintiéndome un poco triste por la reacción de Chloe.
—Lo sé, Chloe. Aprecio que te preocupes. Pero también necesito darte la oportunidad de demostrar que puede ser diferente.
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El parque estaba tranquilo y el aire fresco de la tarde me llenaba de energía mientras intentaba mantener el equilibrio sobre el monopatín. Vinnie me animaba desde un lado, y aunque había caído varias veces, no me daba por vencida.
