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Nada más escuchar la aclaración de la más bajita de todas, Jennie comenzó a sentir una fuerte presión en su pecho, como si se quedase sin aire. ¿La quería? No, no podía ser así, no después de todo. Pero a quién quería engañar, sí que lo hacía.

-"Nunca se deja de querer a alguien por quien sentiste tanto" admitió intentando sonar razonable. "Así que sí, la quiero, pero de la misma forma que lo hacéis vosotras" mintió notando cómo Irene fruncía el ceño.

-"Mentirosa" pensó el pequeño trio nada más oír su respuesta.

-"Sería un poco raro ¿no crees?" preguntó Jisoo con picardía.

-"¿El qué?" preguntó Jennie de vuelta.

-"Que a estas alturas la quisieras como algo más" aclaró la morena de piel.

Raro. Ese adjetivo se quedaba corto en comparación, pero sí que lo era, y mucho. Sobre todo después de haber dicho 'la quiero' en voz alta.

No podía seguir pensando en Lisa constantemente, tenía que controlarse porque lo último que quería era engañar a su prometida. Pero... ¿cómo hacerlo si la primera que se engañaba era ella?

-"Bueno dejadla ya" saltó Rosé, mirando a sus mejores amigas con una expresión que dejaba claro que se habían pasado. "Si sintieras algo más por Limario sería completamente compresible Jen, y para nada te criticaríamos por ello" explicó con una débil sonrisa. "Para nosotras, lo único importante es tu felicidad y si la torpeza en persona, te la da, adelante con ello" admitió consiguiendo que el resto asintiera.

En ese momento, Jennie solo pudo responder devolviéndoles la sonrisa y abrazándolas fuertemente. Pero sabía que no había respondido y debía hacerlo de una forma sincera y a la vez que le diera la opinión que estaba buscando.

-"Nayeon forma parte de mi felicidad, chicas" respondió finalmente.

-"Lo sabemos, desde hace varios años" intervino Irene. "Por eso, si tomas alguna decisión importante en la que ella no esté implicada, díselo pronto, aunque duela, díselo" dijo sosteniendo sus pequeñas manos, con las de la artista. "Todas sabemos que eso es la mejor opción" concluyó apretándolas con fuerza.

Dicho esto, volvieron a fundirse en un abrazo. Ahora Jennie sabía todo lo que necesitaba saber y se olvidó del resto durante unos segundos. Mismos en los que Rosé quedó pensativa, recordando la noche anterior.

-"A veces pienso en la noche que ocurrió todo" soltó dando un suspiro mientras se sentaba en el sofá. "Escuchamos cómo Limario admitía que te había engañado durante dos años y nos centramos más en eso, que en el hecho de que estaba siendo maltratada" explicó. "Le dije tantas cosas..." dijo arrepentida.

-"Yo también se las dije" respondió Jisoo.

-"Y yo" se unió Irene. "Pero éramos unas crías, unas inmaduras, por eso desde el primer momento que la vi, no le tuve ningún rencor, porque sabía que yo lo había hecho peor" explicó a lo que la morena de piel asintió.

Fue entonces cuando tanto Rosé como Jennie se miraron entre ellas. Eran las únicas que le habían guardado rencor. Una por haberle roto el corazón y otra por sentir que no eran tan mejores amigas como ella pensaba. Una tontería realmente.

-"Dejamos que se fuera sin ayudarla" resopló la rubia. "¿Cómo no te diste cuenta?" preguntó mirando a la de gatunos ojos verdes.

-"Nunca hablaba de sus problemas, y jamás le vi ningún hematoma hasta esa noche y sus padres... joder, todas sabemos lo feliz que aquella familia parecía"

-"Pero Jen, tú eras la que más tiempo pasabas con ella, la que la veías desnuda, deberías de haberlo notado" le echó en cara Jisoo pero en un tono calmado.

adaptación- cenizas - JenLisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora