adaptación- cenizas - JenLisa

LXXI

Mientras Jennie había mantenido aquella conversación repleta de distintos sentimientos, fuera de la carpa, a oscuras y con Lisa, uno de los camareros se había acercado a Nayeon entregándole no solo la copa que había pedido, sino también un sobre blanco con el contenido que esparció en el suelo de la casa rústica.

Si Julia o Namjoon, los cuales se encontraban cerca de la castaña en ese instante, le hubieran prestado atención a dicha escena, hubieran identificado al camarero como Taecyeon Ok.

Al tener el sobre entre sus manos, frunció el ceño pensando que sería otro de los que muchos invitados le habían dado como regalo de bodas, llevando en su interior cierta cantidad de dinero. Pero aquel pensamiento quedó a un lado al provenir de un empleado.

Dejando su copa en una mesa cercana, se secó en su blanco vestido la pequeña humedad que había dejado ésta en su mano, y lo abrió.

Ojeando a simple vista el contenido, observó que no eran billetes, sino fotos. Confusa, cogió una de ellas y al mismo momento la soltó. Fue entonces cuando notó un disparo sin arma sobre su pecho, concretamente en su corazón. Las lágrimas amenazaron enormemente con salir y el anillo de compromiso comenzó a quemarle en el dedo anular.

Antes de que nadie pudiese verla, se limpió el diminuto rastro brilloso que había quedado en sus pómulos y seguidamente apretó el sobre con fuerza con ambas manos. La ira estaba comenzando a incrementar dentro de ella, pero era tanto el dolor que sentía que se mantuvo inmóvil.

-"Nayeon" se acercó Mina a ella, dejando su suave mano apoyada en el hombro de ésta. "¿Va todo bien?" añadió en un tono preocupado y desconfiado al bajar la vista y observar el sobre.

-"Sí, solo me he emocionado con la carta de una prima a la que estaba muy unida en la infancia" mintió rápidamente, al ver a los padres de ésta detrás de su amiga, sintiéndose incapaz de contarle la verdad, no allí, no delante de todos.

La asiática no había llegado a creerla del todo puesto que su mejor amiga no era de esas personas que se emocionaban fácilmente, pero lo dejo pasar creyendo que la celebración había sido la causa de su sensibilidad.

-"¿Has visto a Jen?" preguntó la castaña de repente, carraspeando la garganta para que no se notase su debilidad.

-"Hace rato que no" respondió Mina con total sinceridad.

Echando un vistazo rápido a su alrededor, observó que no solo se notaba la ausencia de la de gatunos ojos verdes, sino también la de Lisa. Incapaz de ir en busca de su mujer por miedo a encontrarla con la odontóloga, y ver la infidelidad de ésta con sus propios ojos, optó por alejarse de todos su invitados y, aun sabiendo que le iba a doler, descubrir el resto del contenido.

-"Si la vez, dile que estoy en la casa" señaló hacia la dirección donde ésta se encontraba.

-"¿Seguro que estás bien?" preguntó la asiática, achinando aún más sus ojos.

-"Completamente" respondió con la sonrisa más falsa que pudo haber puesto nunca.

Minutos después, la pareja protagonista de la noche, volvieron a encontrarse. Jennie se había agachado antes las imágenes haciéndose la sorprendida, para que Nayeon no supiese que las había visto antes, pero aun así, no lo podía creer y en ese momento tuvo muchísimas preguntas en su cabeza, pero la principal fue, ¿cómo había acabado con ellas?

-"Así que son reales..." dijo la castaña en un hilo de voz, dejando la boca un tanto entreabierta, al ver que la artista no respondía.

-"Nayeon yo..." se levantó.

-"¿Qué, Jennie?" la cortó. "¿Vas a decirme que no es lo que parece? ¿Que lo sientes? ¿Que fue un error?" preguntó, mirándola fijamente a pesar de que eso le doliese más.