adaptación- cenizas - JenLisa

LXXIII

Por la misma mesa en la que los codos de Jennie estaban apoyados, habían pasado innumerables personas con el mismo propósito que ésta, y el oficial estaba al tanto de eso. Sin embargo, su penetrante mirada le había llevado a colocarla en un grupo exclusivo, por eso mismo el que respondía por el apellido Booth y llevaba uniforme, decidió echarle un vistazo al contenido de aquella carpeta que yacía en sus manos.

Notando la respiración inquieta de la artista y su acompañante, frente a él, sus ojos se toparon con lo que identificó como amenazas al instante y con lo que parecía la portada de una revista, además de fotos reveladas en tamaño A4 sobre una carpeta que llevaba el nombre de Jennie Kim. Afirmando que fuese ésta la misma que se encontraba allí, echó un vistazo a un trozo de papel con una citación al médico, de la misma caligrafía de las cartas, siendo aquel lo último del lote.

-"Necesito que rellenes esto mientras yo me ausento" habló el oficial Booth, antes de dejarlas a solas.

Escuchando sus sonoros pasos alejarse, la de gatunos ojos verdes cogió el bolígrafo que éste le había dejado allí antes de echar un vistazo al documento denominado como 'Denuncia Pública Particular' Incapaz de escribir por el temblor de sus manos, se pausó varios segundos para leer cada hueco que debía rellenar con sus datos personales. No podía más con aquella situación, por lo que rápidamente comenzó a escribir, intentando que aquello concluyese pronto.

Por el suspiro que la artista dio, Julia supo que eso no era nada fácil para ella, y aunque lo entendiese, no podía hacerlo perfectamente porque no estaba en su concreta situación. Su vida, en ese instante, era un completo caos o una montaña rusa de sentimientos, tal y como le hubiese llamado su hermana, pero ella no viajaba sola.

-"Tranquila, Jen" le pasó su mano por la espalda. "Esto es lo mejor para todos" añadió.

-"¿Quién nos lo asegura?" suspiró, recordando cómo Siwon le había dejado claro que si iba a la policía, él lo sabría.

-"Esto" tocó el pecho de Jennie, concretamente su corazón.

Sonriendo de lado, la artista asintió volviendo a coger aire y buscó con la mirada al oficial que había permanecido junto a ella minutos atrás. En cuanto dio con él, observó cómo éste hablaba seriamente con otro que por sus divisas, supuso que sería de un rango superior. Julia, mientras tanto, observaba aquel lugar que no sabía por qué le había transmitido algo especial. Era como si realmente perteneciera allí.

En cuanto el oficial Booth terminó de hablar con su compañero, ambos miraron hacia la artista y la veinteañera, antes de comenzar a caminar hacia ellas. Sintiendo cómo el corazón se le aceleraba y las manos le temblaban cada vez más, guardó éstas en su abrigo para ocultarlas, esperando a tenerlos cerca.

-"¿Jennie Kim?" preguntó el que había asignado con un rango superior, a lo que ésta asintió.

Mismo nombre que se había repetido en la cabeza de Lisa desde la noche anterior, consiguiendo que apenas hubiese conciliado el sueño y le pasase factura esa misma mañana en la consulta, siendo además, un día donde predominaban los pacientes entre siete y nueve años.

-"Espero que esas ojeras no sean de haber salido de fiesta sin mí" habló Namjoon, entrando en su consulta sin pegar, sosteniendo en sus manos dos tazas de café.

-"Me has pillado" curvó los labios mientras se levantaba de la silla. "Gracias" añadió, cogiendo el suyo, después de darle un beso en la mejilla.

-"Entonces son los niños" bromeó, sabiendo realmente el motivo.

-"Los odio" masculló la odontóloga mostrando una ligera sonrisa antes de volver a sentarse y darle un buen sorbo.

-"Me parte el corazón que no te gusten" exageró, llevándose el puño al pecho. "¿Quién será la madrina de mis hijos entonces?" preguntó riendo.