adaptación- cenizas - JenLisa

XXXIII

Tan fácil como responder. Tan fácil como afirmar todo lo que Lisa había dicho. Tan fácil cómo dar un paso atrás y salir de allí. Todo eso no hubiera tenido dificultad si la de ojos marrones no hubiera dejado de mirarla en ningún momento con sus labios a milímetros de los de Jennie.

En cuanto la más bajita estuvo a punto de volver a cerrar la distancia entre ellas, por suerte o por desgracia, el móvil de Jennie comenzó a vibrar en su mano consiguiendo que ambas se separasen rápidamente. Antes de responder, la más alta miró a Lisa.

-"Deberías cogerlo" propuso volviendo hacia el asiento donde estaba su bolso. "Tú y yo no tenemos nada más que hablar" dijo realmente enfadada saliendo de allí pasando rápidamente por al lado de Jennie chocando con su hombro.

¿Que había sido una estúpida por dejarla sola? Sí. ¿Que estaba enfadada por no haber podido besarla? También. Pero no era solo eso lo que recorría su mente sino el silencio por parte de la de gatunos ojos verdes al decirle todo aquello. Dicen que el que calla, otorga pero...

¿estaría Jennie incluida?

Suspirando, llegó hasta la barra que había dejado antes sentándose en uno de los taburetes, pidiendo esta vez no un Martini blanco, sino dos. En cuanto los tuvo frente a ella, se bebió el primero de un solo trago.

-"¿Noche dura?" preguntó una voz conocida sentándose a su lado.

-"Julia no estoy en condiciones ahora mismo para bromear" dijo sin mirarla.

-"Es por Jennie ¿verdad?" insistió quitándole el Martini de las manos.

-"¡Eh!" gruñó Lisa. "Eso es mío, devuélvemelo" ordenó frunciendo el ceño.

-"No hasta que me respondas" replicó la menor de las hermanas.

En ese momento lo único que pudo hacer fue soltar un suspiro que a pesar de escucharse de fondo la fuerte música, se oyó entre ellas dos. Claro que estaba así por Jennie. Claro que estaba siendo una noche dura. Pero no era tan fácil decirlo.

-"Te he dicho que no estoy en condiciones" dijo levantándose del taburete. "Quédate la copa si quieres" añadió antes de marcharse.

Mientras iba caminando sin saber a dónde, notando el efecto del alcohol en su cuerpo, se encontró frente a ella a Jiyong y Naeun Kim. Éstos parecían no haberla visto por lo que rápidamente se fue en la dirección contraria buscando otra distracción hasta que lo encontró. Namjoon. El castaño estaba bailando junto a Irene y Rosé, mientras Jisoo bailaba con otro chico desconocido. No tardó en llegar hasta allí y apartarlo del resto colocándolo frente a ella.

-"Necesito despejarme" le susurró a su oído. "Prometo explicarte después" admitió sabiendo que no podía ocultarlo más.

-"¿Qué tal si bailamos?" le propuso con una sonrisa antes de dejar un beso en su frente. "Ven" la guío agarrándola de la mano.

Mientras Light It Up de Major Lazer comenzaba a sonar provocando que varias personas los siguieran, llegaron hasta la pista de baile donde Namjoon dejó un beso en su mejilla antes de cogerla por ambas manos y comenzar a bailar.

Por fin una sonrisa sincera salía de su rostro provocada por el castaño quien bailaba frente a ella haciéndole reír por sus malos pasos. Lisa tampoco era una experta pero sabía que Namjoon lo estaba haciendo a propósito. No tardaron en unirse Irene, Rosé y Julia. A ésta última, se acercó susurrándole un 'lo siento' en el oído antes de comenzar a bailar con ella también.

Sus caderas se movían al ritmo de la música mientras todos la piropeaban. Era inevitable, la Lisa universitaria había vuelto y Namjoon estaba al tanto de ello. Ya no le importaba la conversación con Jennie. El alcohol y la diversión se habían apoderado de su cuerpo. Solo quería seguir despejándose de aquella forma que conseguía hacerla sonreír.