Capitulo 50

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Un Nuevo Crimen y Revelaciones

El Crimen de Daniel Vargas

Un nuevo crimen surgio dos dias despues la noticia del asesinato de Daniel Vargas, el testigo desaparecido, conmocionó a Elise y a su equipo. Daniel había sido encontrado muerto en circunstancias misteriosas.

Elise llegó al lugar del crimen con el rostro pálido y la mirada perdida en la escena.

—Daniel... No puedo creerlo. ¿Cómo pudo suceder esto? —murmuró, incapaz de comprender la tragedia que tenía ante ella.

Claudia, revisando las pruebas, sacudió la cabeza con seriedad.

—Parece que fue asesinado recientemente. La escena es bastante limpia, sin muchas pistas claras —dijo, su voz cargada de preocupación.

Roberto, frustrado, golpeó una pared cercana.

—Es como si estuvieran dejando un mensaje. ¿Quién querría eliminar a Daniel justo ahora? —preguntó, mirando a Elise en busca de respuestas.

En ese momento, el teléfono de Elise sonó. Ella respondió rápidamente, solo para escuchar una voz fría y amenazante en el otro extremo.

—Elise, tengo a Helena. Si no abandonas el caso, la mataré. Tienes 24 horas para rendirte o ella morirá —dijo la voz desconocida, su tono gélido haciendo que la sangre de Elise se congelara.

—No, por favor. Déjala en paz. Haré lo que sea necesario para salvarla. ¡No la lastimen! —rogó Elise, su voz quebrándose por el miedo y la desesperación.

La llamada se cortó abruptamente, dejando a Elise y a su equipo devastados. La escena del crimen, ahora se sentía sofocante y desesperante.

—No sé qué hacer... Debemos salvarla. ¡No podemos permitir que esto termine así! —dijo Elise, con lágrimas en los ojos, mirando a su equipo en busca de apoyo y soluciones.

 La Trágica Descubierta

Días después, el cuerpo de Helena Marín es encontrado colgado en el nuevo puente construido por Gabriel y sus socios. La escena es impactante y desgarradora.

Elise, al ver el cuerpo de Helena, siente una ola de furia y dolor que la consume. Se arrodilla, lágrimas de rabia y tristeza brotando de sus ojos.

—Gabriel... No puede ser. ¡Tú estás detrás de esto! —gritó, su voz resonando en el silencio del lugar, llena de odio y desesperación.

  Elise decide ir directamente a la casa de Gabriel para confrontarlo. Al llegar, se encuentra con Mia, quien la espera con una mirada cargada de desafío.

Mia, con una amenaza latente en su voz, se adelanta.

—Si vuelves a molestar a Gabriel, te arrepentirás. No estás bien de la cabeza, Elise —le advirtió, con una frialdad que helaba la sangre.

Elise, tratando de mantener la calma, le responde con una voz temblorosa pero firme.

—Mia, por favor. Helena está muerta. Necesitamos respuestas. Gabriel está involucrado en esto —dijo, cada palabra un grito de desesperación.

Mia, con los brazos cruzados y una mirada desafiante, niega con la cabeza.

—Gabriel no tiene nada que ver con esto. Solo estás obsesionada y tratando de destruirlo —contestó, su voz cortante como un cuchillo.

   Mia, sin escuchar más, se da la vuelta y comienza a correr, alejándose de Elise. Frustrada y con el corazón en pedazos, Elise sabe que debe actuar. Se vuelve hacia la policía, su voz cargada de determinación y miedo.

—Necesito una orden judicial contra Gabriel. Mia está afirmando que estoy obsesionada, pero esto es serio. Helena ha muerto, y Gabriel está involucrado —dijo con firmeza, su voz apenas contenida por la rabia y la tristeza.

   La situación se complica aún más cuando Mia, con una sonrisa fría, presenta una demanda en contra de Elise, alegando acoso y obsesión. La noticia se esparce rápidamente, añadiendo más presión y dificultad a la situación de Elise.

Elise, enfrentando ahora no solo al asesino de Helena sino también a un sistema que la acusa, se siente cada vez más sola y desesperada. Su determinación se convierte en un fuego incontrolable, y su única certeza es que no descansará hasta descubrir la verdad.

—No voy a detenerme hasta que Gabriel pague por lo que hizo. Helena merece justicia, y yo seré quien la consiga —dijo Elise, con una mirada de acero y un fuego en el corazón que nadie podía apagar.

 La Investigación de Claudia, Roberto y Carmen

  Mientras Elise enfrenta problemas legales y personales, Claudia, Roberto y Carmen están en la oficina revisando nuevos hallazgos.

Claudia: (con expresión preocupada) Elise está enfrentando muchos desafíos ahora mismo, pero tenemos algo importante. La conexión entre los crímenes y una red de tráfico de personas se está volviendo más clara.

Roberto: (asintiendo) La evidencia apunta a que estos crímenes están encubriendo actividades más grandes. El tráfico de personas podría ser el motor detrás de todo esto.

Carmen: (revisando documentos) Además, encontramos que el fiscal tiene conexiones con varias de las víctimas. Esto lo convierte en un nuevo sospechoso en la investigación.

Elise: (entrando en la oficina, agotada) ¿Qué han encontrado? Estoy en medio de un caos personal y legal. Necesitamos resolver esto.

Carmen: (mirando a Elise) La conexión con el tráfico de personas y el fiscal es alarmante. No podemos permitirnos perder de vista estas pistas.

Claudia: (determinada) Ahora más que nunca necesitamos concentrarnos en el caso. A pesar de todo, debemos seguir adelante y encontrar la verdad.

Elise: (con firmeza) Haremos lo que sea necesario para resolver esto. No importa el costo.

BelianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora