Mismo Lunar [MilkLove x LingOrm]

6. Celos

Estaba tratando de controlar adecuadamente mi respiración, inhalaba y exhalaba.

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Contaba mentalmente a la par de mis respiraciones. Pasé la palma de mis manos por sobre el hoddie que llevaba puesto, los nervios habían causado que mis manos suden.
Sentía como los músculos de mis piernas me temblaban.
¿Cómo llegué a este punto? Me sentía patética.
Yo era quien le destapaba sus botellas de agua e inclusive le daba sus medicamentos en la boca, a veces la arropaba. Las cosas cambiaron.

Levanté la mirada y ahí estaba ella, se veía muy concentrada en la charla que tenía con Rebecca, mientras arreglaba mechones rebeldes de cabello que caían sobre su rostro. Por momentos sonreía mientras asentía, quizá por algún chiste o algo gracioso que ella le comentaba. Sus ojos alegres y brillantes la miraban a ella. Desearía ser yo la que esté ahí al frente de ella y ser la causante de sus risas.

El sonido de un palito rompiéndose llamó mí atención, busqué el orígen del sonido. Miré hacia mi mano derecha mientras la elevaba a la altura de mí rostro y ví a mi pobre lapicero partido en partes desiguales.

— Ay noooo.— Dije con tristeza. Era el único lapicero azul que tenía en el Instituto.Tenía uno de repuesto, pero estaba en casa. Me dirigí hacia el tacho de basura que estaba a la altura de la columna, pisé la palanca que permitía abrir la tapa y lo dejé ir.— ¡Ish!.— Me quejé mirando los restos de los que hace unos segundos había sido un lapicero.

— ¿Ocurre algo Vosbein?.— La voz de Rebecca me hizo dar un pequeño salto de alerta. Le sonreí de forma que trataba discimular mis nervios. Mis ojos fueron de forma rápida hacia la pequeña chica que Rebecca tenía frente suyo. Love tenía su atención puesta en mí, me miraba de forma curiosa esperando una respuesta.

— Becky, no creo que le ocurra algo.— Dijo con una risa de lado.— ¿No pasa nada verdad, Vosbein?.—

— Yo...—

Era ahora o nunca, tenía que atreverme a decirle que ella y yo...

— Ya lo ves, Becky.— Love hablaba , sus ojos continuaban fijos en los míos.— A ella jamás le ha pasado algo o siquiera le pasará…— Becky intercalaba su mirada entre Love y mi nervioso rostro.

— Love.— Los nervios estaban matándome internamente, pero tenía que seguir hablando.—... Tengo que decirte algo importante...—

— ¿En serio? Puedes decirlo, soy toda oídos.— Love estaba sacando algo de su casillero.

— Yo… He sido elegida para ser tu compañera. Tenemos que realizar el informe juntas.— Dije rápido mientras cerraba los ojos, no soporté más el verla directamente. Deseaba poder estar a solas con ella.

— Lo sé, te enviaré el informe hecho, tú te encargas de revisar y arreglar datos si es necesario.— Su voz fue fría, cortante y con poco interés en mi opinión y en cuanto terminó de hablar, tomó la mano de Rebecca y ambas empezaron a caminar alejándose del pasillo. Bajo mi mirada llena de confusión por lo rápida que había sido su respuesta y mi notable molestia por aquel agarre de manos, ambas se perdieron por el largo pasillo.

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La cancha de Voley era un campo de batalla para la capitana y sub capitana del equipo. Ambas ahora se enfrentaban, cada una con su bando y sus posiciones.

Sirilak estaba en posición de saque, su mirada llena de competitividad estaba puesta en una soberbia Rati, la sub capitana. El silbato sonó y con mucha determinación la capitana llenó de aire sus pulmones, lanzó el balón lo suficientemente alto como para saltar y dar un remate. Las chicas del equipo contrario se pusieron en alerta mientras Rati corría al encuentro del rápido balón.