𝗔𝗟𝗟 𝗙𝗢𝗥 𝗨𝗦 • 𝔱𝔥𝔢 𝔪𝔞𝔷𝔢 𝔯𝔲𝔫𝔫𝔢𝔯

𝟭𝟯. 𝗦𝗛𝗘 𝗜𝗦 𝗡𝗢𝗧 𝗛𝗘𝗔𝗟𝗜𝗡𝗚

SHE IS NOT HEALING
•••

Ha pasado ya una semana desde la llegada de Matt. Nos hicimos muy buenos amigos en estos pocos días. Lo cual era bueno para nosotros, pero no tanto para los demás, pues habíamos estado haciendo algunas bromas para matar el aburrimiento, debido a que ninguno tenia nada que hacer durante el día.

Una semana desde la llegada de Matt, y casi un mes desde que casi muero.
El dolor en mi abdomen era fuerte y constante, empeorando cada que hacia un esfuerzo muy grande, pero nunca me ha gustado la idea de que los chicos piensen que soy débil solo por ser una chica. No me gusta que me traten diferente.
Y, claramente, si ven que sufro por cada maldito paso que doy, no me dejarán ni levantarme de la cama.
Así que llevo tres semanas, desde que desperté, fingiendo estar bien, fingiendo no sentir dolor, fingiendo que todo está bien.
Pero claro que no es así. El dolor solo empeora. La herida parece estar sanando, pero aún así el dolor no deja de estar ahí.
Cada día me ha resultado más difícil ocultarlo.

Y creo que hoy no podré más.

Era temprano, en la madrugada, cuando el dolor intenso se hizo presente, obligandome a despertar. No podía ni siquiera darme vuelta en la cama sin querer llorar por el dolor tan grande que sentía.
Quería llorar, gritar, pero no quería alertar a los chicos, no quería preocuparlos.
Así que pase toda la madrugada sufriendo en silencio. Esperando que para el amanecer el dolor hubiera desaparecido y así poder actuar con total normalidad.
Pero no fue así.

La luz del día comenzaba a asomarse por las aberturas entre la madera, y el dolor seguía siendo igual o más intenso que antes.
Cuando escuché a Sartén gritar que era hora del desayuno, intenté levantarme, pero no pude.
El dolor no me dejaba moverme.
«¿Estoy muriendo?
¿Moriré sin volver a ver a mi hermano?
¿Moriré sin decirle a Newt que tiene una hermana?
¿Moriré sin decirle a los chicos la verdad?
¿Moriré sin decirle a Minho la verdad?»

Esas y más preguntas pasaban por mi mente mientras sentía que mis ojos se cerraban.

«No quiero morir aún. No sin haber sacado a todos de aquí a salvó»

Unos minutos después, que más bien me parecieron horas. La puerta de mi cabaña se abrió.
Dejando ver a un pequeño castaño de rulos, que cambió su sonrisa por una expresión de preocupación apenas me vio.

— ¿Ara? ¿Ara estás bien? —se acercó, su voz se quebraba—

Quise responderle que todo estaba bien, que no tenía por qué preocuparse, pero cuando quise hablar, la voz no salió.
Con las pocas fuerzas que tenía, negué con la cabeza, respondiendo a su pregunta.
Mi vista estaba borrosa, apenas podía tener mis ojos entreabiertos.
Vi las lágrimas sobre las mejillas de Chuck, antes de que saliera corriendo de ahí.

•••

Minho Pov's.

Era de mañana, la hora del desayuno, para ser exacto.
Estaba sentado junto a Ben, Alby, Newt, Matt, Jeff y Chuck.

Desde que llegué a la fila para esperar mi comida me extraño no ver a Ara ahí. Pues normalmente ella, Chuck, y Matt, eran los primeros en la fila. Pero hoy solo estaban los últimos dos.

Lo deje pasar, pues supuse que tal vez se habría quedado dormida, y por más ganas que tuviera de ir a despertarla yo mismo, ya no tenía una excusa, como antes con el laberinto.
Extrañaba ir a molestarla por las mañanas, al igual que molestarla en el laberinto, y a veces en las tardes cuando la veía. Era mi pasatiempo favorito.
Ahora solo podía verla en el desayuno, antes de irme o por las tardes.