THE EXPECTED FATE
•••Una mujer vestida de blanco se acercó y puso una mano en mi hombro. No me daba nada de buena espina.
— Mamá... —llamé a la mujer frente a mi. Un pequeño Aris estaba abrazado a su pierna mientras un hombre se acercaba a él.
— No hagan esto más difícil, pequeños —dijo con ojos llorosos, tratando de apartar a Aris de ella.
— ¿Por qué tenemos que irnos? —solté con reproche.
— Es lo mejor, cielo —se agacho a mi altura y acaricio mi mejilla, limpiando las lágrimas que escurrieron por esta—. Estarán mejor con ellos
Aparte su mano con molestia.
— No te enojes conmigo, Ara. Entiende porque lo hago —dijo con voz quebrada. Me arrepentí de haberla apartado y me lanze a sus brazos para abrazarla.
— No quiero ir con ellos —me solté a llorar.
— Yo tampoco quiero irme, mamá —dijo Aris aferrándose a ella nuevamente.
— Vamos, es hora de irnos —hablo uno de los grandes hombres junto a nosotros.
— No, esperen, solo un poco más —pidió la castaña con lágrimas en los ojos.
— Tenemos un trato, tienes el dinero, nos das a los niños —hablo la mujer de bata, tras nosotros.
— Cambie de opinión, puedo devolverles el dinero —dijo mi madre con desespero.
— Mamá, no dejes que nos lleven —rogó mi hermano envuelto en lágrimas.
Abracé a Aris y nos pusimos detrás de mamá.
— No puedo dejarlos, tomen el dinero —mamá saco un sobre blanco de su bolso y se lo extendió a la mujer.
— Me temo que esto no funciona así —dijo la rubia. Con un movimiento de cabeza, los hombres se acercaron a nosotros.
— No, no, mamá —la desesperación me inundó.
— No, por favor, mis hijos no —grito mi madre mientras un hombre lo sujetaba y dos más caminaban hacia nosotros.
Aris lloriqueaba en mis brazos.— Sabías cómo era esto, Amanda —le dijo la mujer a mi madre.
Los hombres se acercaron y nos sujetaron a cada uno. Ambos luchamos por liberarnos, pero eran demasiado grandes y fuertes para dos niños de siete años.
Mamá también luchaba contra el otro hombre, quien, cansado de los gritos, le dió un golpe que le robó el aire.Aris y yo gritamos asustados viendo a mamá caer al suelo de rodillas.
Gritamos, lloramos, pataleamos, hicimos de todo, y nada funcionó. Los hombres nos arrastraron dentro de un tren, y cuando la mujer rubia entro con nosotros, las puertas se cerraron, dejándonos a ambos solos con ella.
La mujer tomo asiento en una silla y nos sonrió como si nada pasara.El rubio y yo miramos por la ventana, los tres hombres levantaban a mamá del suelo toscamente.
Ni Aris ni yo podíamos controlar las lágrimas al ver que nos estaban alejando de nuestra madre, y no solo eso, si no que, además, la estaban golpeando.
Uno de los hombres recibió un rodillazo en la entrepierna por parte de mi mamá, y esa fue la gota que derramó el vaso.
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𝗔𝗟𝗟 𝗙𝗢𝗥 𝗨𝗦 • 𝔱𝔥𝔢 𝔪𝔞𝔷𝔢 𝔯𝔲𝔫𝔫𝔢𝔯
Hayran KurguTrilogía: The Maze Runner Minho x Oc. A veces debemos hacer sacrificios por la gente que queremos, pero, ¿Qué tan grande podría ser ese sacrificio? Algunos están dispuestos a morir, y otros a matar... 20 / Junio / 24 20 / Noviembre/ 24 Sin más, Di...