𝟰𝟳. 𝗧𝗛𝗘 𝗗𝗘𝗔𝗧𝗛 𝗖𝗨𝗥𝗘

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THE DEATH CURE
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Narrador omnicente.

La chica aceleró la camioneta al entrar a las vías, siguiendo al tren. A su lado, de copiloto la acompañaba su amigo Thomas, quien se encargaba de informar a Brenda y Jorge sobre cualquier amenaza.

— ¡Ten cuidado Thomas! —le pidió la chica al saber la próxima parte del plan.

Una vez que se acercaron al tren, Thomas salió y se montó en la parte delantera del auto en movimiento

— ¡Ara, acercarme más!

La chica obedeció, acelerando aún más hasta estar a centímetros del tren y así, el castaño pudiera enganchar ambos vehículos. Una vez cumplidos ese propósito, el castaño saltó hacia el tren y se giro hacia su amiga.

— ¿Qué esperas Ara? —la apresuró a seguirlo.

Ella no lo pensó mucho y salió de la misma forma que el castaño. Apenas se puso de pie, uno de los neumáticos de la camioneta falló y la hizo desestabilizarse y que por poco callera.
Una vez logro volver a tener equilibrio, no dudo en saltar al tren. Justo a tiempo antes de que el gancho se soltará y la camioneta se volcara.
El castaño ayudó a la chica a sujetarse bien, y cuando estaban listos para subir

— Un berg —señalo la chica a sus espaldas, dónde el dron se dejaba ver no muy lejos.

— Oye Brenda, tienes compañía —aviso el castaño a los otros dos. Quienes no tardaron mucho en ser atacados por los guardias dentro del berg.

Los dos no tardaron mucho más y subieron por las escaleras hacia la parte superior y corrieron sobre los vagones.
Topándose que frente a ellos venían también varios guardias armados en dirección contraria.
El chico saltó entre la división de vagones y rebuscó entre sus cosas el explosivo que los haría separarse.
Mientras tanto, la chica tomaba su arma con decisión para cubrir los movimientos de su amigo y tratar de frenar a los hombres uniformados.

Comenzó a disparar, logrando derribar a varios de ellos, pero seguían superandolos en número por mucho.

— Thomas ¿Quieres darte prisa? —le exigió con desespero al ver que cada vez estaban más cerca de ellos.

— ¡Ya está! ¡Cubrete!

Ambos corrieron a cada uno de los lados del vagón para cubrirse de la explosión, que pocos segundos después detonó, dejando cegados a los guardias que corrían tras ellos; además de lograr separar los vagones.

Una vez que el tren se detuvo, ambos chicos bajaron y llamaron al siguiente en turno para cumplir con el plan: Newt.

El rubio salió de detrás de las rocas en compañía de Vince y otro muchacho.

La chica comenzó a golpear el primer vagón, con la esperanza de que su objetivo estuviera ahí.

— ¡Minho! —llamó varias veces esperando escuchar una respuesta. Y así fue.

Aún entre todos los demás gritos, ella reconoció el del pelinegro.

— Es este —le informo al rubio, quien pronto se arrodilló y empezó a trabajar para desoldar el vagón.

— Ay carajo, ya vienen —dijo el mayor al ver al montón de guardias armados acercarse.

...

Mientras tanto, los demás tenían que seguir ejecutando la otra mitad del plan.

Brenda y Jorge seguían a toda velocidad, evitando los disparos que les proporcionaban desde el berg.
Pero pronto, no hubo a dónde más ir y tuvieron que detenerse.

𝗔𝗟𝗟 𝗙𝗢𝗥 𝗨𝗦  • 𝔱𝔥𝔢 𝔪𝔞𝔷𝔢 𝔯𝔲𝔫𝔫𝔢𝔯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora