El Talismán

7: Inevitable

Draco aún no podía sacarse de la cabeza lo que esa pequeña sangre sucia le había hecho ¡Lo había besado por Dios Santo! ¿Qué se creía al profanar sus sacrosantos labios de ese modo tan impropio y con ese atrevimiento?

Aún no salía de su aturdimiento, estaba estupefacto, es que ¡Maldita sea! No lo podía creer… de inmediato se fue al baño y enjuagó su boca con abundante agua, para quitarse el sabor… Pero, el problema era que… no se quitaba…

¿Qué clase de hechizo le había lanzado esa sangre sucia al profanar sus labios de ese modo? ¿Qué le había hecho? ¿Acaso quería causarle más conflicto? ¡Estaba loca!

-Ya sé quien tiene el talismán – informó Alex a Ale

-¿En serio?

-Y ya surtió efecto su poder – Musitó

-Bromeas… ¿Así de rápido?

-Falta lo peor

-¿Qué pasa? – preguntó Ale azorada

-Averigüé quien es esa muchacha… se llama Hermione Granger, hija de muggles…

-¿Es impura?

-Sí pero… silencio… - Miró a todos lados – Junto con Harry Potter y Ronald Weasley son los héroes del mundo mágico…

-Conocí por fin al “héroe” Harry Potter – y sonrió con sorna – Es un inútil… parece que sufrió un accidente y ahora está hecho un tullido estorboso…

-Alessa…

-¡Es la verdad! ¡Ay Alex! ¿Qué te pasa?

-Pensé que te portarías mejor aquí ¿Sabes lo que diría la abuela?

-¿Qué soy una arpía fría y malévola? – Soltó una carcajada y Alex no pudo reprimir una sonrisa, su hermana era todo un caso, eran lo blanco y lo negro, el ying y el yang.

-Mejor te comportas… si alguien escucha como te expresas del muchacho… te podría ir mal… aquí lo adoran…

-Yo se que su novia lo mando al carajo cuando se enteró que quedaría con la pata chueca…

-¿Qué?

-Una pelirroja muy guapa… que dicen que ya te echó el ojo…

-Ginny Weasley…

-Si… ¿Piensas hacerle el favor de andar contigo o qué?

-No…

-¡Vamos Alex! Tampoco eres un santo, no dejas un títere con cabeza… anda, sal con ella y yo, me portaré bien y no andaré diciendo que Harry Potter es un tullido…

Alex le lanzó una mirada incordiosa a su guapa hermana, pero se quedó pensativo, era un chico libre, finalmente ¿Por qué no?

En tanto…

Algo pasaba por su cabeza… la racionalidad de sus pensamientos parecían huir con el paso de los minutos, había una lucha en su cerebro contra el influjo del talismán… la poca claridad que poseía le hacía recordar el beso dado a Draco…

Pero no se la creía ¿Qué había sido eso? ¿Un sueño malsano que había tenido en algún momento?

Y de pronto sus ojos parecía nublarse de nuevo y aquel sueño le parecía maravilloso e increíble… besar los labios suaves, delicados de un sangre limpia… ¡Ni en sus sueños! Y seguramente el entendería que era la mujer perfecta para él…

Su racionalidad…

Negó de inmediato mirando a todas partes sudando frio…

¿Qué le estaba pasando?