Para barbaritagiselle
- El amor me hará padre de nuevo, estoy tan feliz. ¡Nuestros hijos! - dijo, besándola cariñosamente.
- Sí, nuestros hijos. Victoriano y yo tenemos que hablar de muchas cosas, que incluirán cambios en nuestros hábitos y rutinas. - ella le acarició la cara.
- Lo sé, recuerda que ya tuve una mamá con embarazo de alto riesgo.
- Sé que Diana tenía preeclampsia, me lo han dicho las chicas, pero aún tengo que confirmarlo haciendo una ecografía o incluso utilizando un aparato específico para escuchar al bebé y asegurarme de que son dos los que están aquí dentro.
- Vamos a tener más cuidado, y voy a estar a tu lado todo el tiempo, ya he empezado a organizarme para pasar más tiempo en Boston, Cassandra ya ha dicho que va a seguir el tratamiento contigo, y Constanza quiere volver contigo el martes.
- Nos quedaremos en Boston unos días, luego volveremos a casa, Hank ya lo ha organizado todo, y se está preparando la habitación que antes era mía.
- Las cosas que pasaron en la cama...- deja de hablar.
- Ya no está en la casa victoriana, Paula habló con Julia y las dos donaron la cama a otra familia que la necesitaba, nuestra habitación en la casa ya tiene todo nuevo.
- ¿La ropa que tocó?
- Victoriano, ya está todo lavado, ya está todo bien, tanto Hank como Paula han hecho lo que les pedimos. Ahora necesito dormir, estoy cansada. - ella se acurruca en sus brazos.
- Vamos a dormir, mañana o mejor dicho cuando amanezca quiero llevarte a algún sitio especial, pero yo iré a caballo y tú en coche.
- Me gustaría montar a caballo contigo, pero ahora no puedo.
- Lo sé, mi amor, pero después de que nazcan nos vamos a casar y nos vamos a ir de boda a caballo, te lo prometo.
- ¿Nos casaremos después de tener a los bebés? - dijo somnolienta.
- Sí, ¿qué hacemos primero? Inés, podríamos casarnos en una ceremonia sencilla, sólo la familia y los amigos íntimos, ¿qué te parece? - se da cuenta de que ella no contesta. - ¿Inés? - llama y nada, pero ella ya está dormida. - ¡Buenas noches, mi amor! - Victoriano la abrazó y durmieron juntos.
Victoriano se levantó de la cama en cuanto los primeros rayos de sol entraron en la habitación, se duchó y se vistió, luego volvió a la cama, Inés dormía serenamente, su respiración era pesada, estaba realmente cansada. Sonrió y la besó para salir de la habitación.
Bajó al salón, la casa seguía en silencio, entró en la cocina y Ester ya estaba hablando con las chicas que trabajaban en la cocina y con los chicos para que preparasen todo para el desayuno en la casa solariega, iba a ser un desayuno especial y tendrían invitados en la casa todo el día.
- ¡Buenos días! - dijo entrando en la cocina.
- Buenos días, don Victoriano. - dijeron todos juntos.
- Hola, buenos días a todos, ¿podría Ester llevarme un café al despacho y avisarme cuando estén todos levantados?
- Claro, enseguida se lo llevo. Feliz cumpleaños Victoriano.
- Gracias. - asintió a modo de saludo, sonrió y salió de la cocina.
- Está más tranquilo con la señora Inés, ¿verdad, señora Ester? - dijo la joven sonriendo.
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¡Enséñame cómo lidiar con esto!📖✅
FanfictionY la historia que tomó tiempo, unió destinos y cambió el futuro. ahora en español