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Las cosas se complican cada vez más, el estrés, la fatiga y el remordimiento me están matando, ¿Qué hago? ¿Qué más hago?.

Rindo: te estresas de más, relájate, dejó de ser tu problema en cuanto ella renunció, o mejor dicho… desde que tú renunciaste a ella, desde que la abandonaste después de esa noche - su voz sonó detrás de mí.

Baje la mirada; pues es verdad, yo la abandoné en primer lugar y apuesto que si no me hubiera enterado que estaba embarazada, yo me hubiera ido definitivamente de su vida, seguramente no me hibiera importado lo de sus hijos después de eso, porque al fin y al cabo, no son míos.

Ran: está embarazada… - hubo un silencio después de eso.

Rindo: ¿Qué? -me voltee y lo ví a los ojos

Ran: _____ está embarazada, la embaracé aquella noche - podrían imaginar su cara en ese momento, de asombró, enojó y algo de ¿felicidad? No, quizá este cagado por lo que hice.

Rindo: estás jugando ¿No? - negué con la cabeza-. Ran, tú jamás aceptarías una responsabilidad como esa, es más, te puedo asegurar que tú mayor miedo, es la responsabilidad.

Ran: es una niña. - declare en seco -. _____ cumplirá 7 meses en dos días

Su rostro ahora estaba en shock, no lo culpó, si me pongo a pensar también, yo tampoco me la creo, pero por primera vez, no tengo miedo a aceptar esto.

Ran: su nombre será Ruri, Ruri Haitani. - como cereza de pastel, lo hice tambalear de sorpresa, mi cara era neutra, fría.

Rindo: ¿Que putas hiciste, Ran?

Ran: se me fue de las manos, pero honestamente, no me arrepiento de nada, así existió mi hija y no lo cambiaría por nada.

Rindo: ¿Por qué verga no me dijiste eso antes? ¿Por eso te desapareces a pisas pidas Tokyo? ¿Por ella? Y por tu bastarda - fruncí el ceño.

Ran: ¡Oye! ¿Qué te pasa? Es mi hija, idiota, encima de esto aún es una bebé de a penas meses de existencia ¿Que te pasa?.

Rindo: si sabes en los pedos que nos podemos meter por esa niña ¿No? De tu mujer no hay bronca, tenemos un papel que no puede ayudar si hace algo estúpido… ¿Cómo chingados se te ocurrió dejarla embarazada? Y encima de eso ¿Por qué aceptar a esa mocosa? Tú odias a los niños.

Ran: tienes razón, odio a los niños, pero esa niña, es mía, es un pedazo de mi y sus hijos… son lo único que le quedó de su hermanó. -pude ver su confusión-. Los niños que le robaron no son suyos son de Yai, Yai y Yumi, son los padres biológicos de esos niños, Asahi no dejó legados porque en el incidente hicieron que ella abortará al bebé de Asahi.

Rindo no dijo nada más, se quedó quieto, pensando no se que. Se que me prometí a mi mismo no contar nada hasta que la bebé naciera y las llevará a un lugar seguro, él es mi hermano, se que cuento con él porque al final del día, solo estamos él y yo para darnos la mano. Mamá no está, papá jamás estuvo, él me tiene a mi y yo lo tengo a él, no existe nadie más cuando se trata de nosotros. El silencio se volvió absoluto, recorrió cada rincón de esa habitación hasta que un suspiró lo rompió, un suspiro suyo.

Rindo: tú solo no podrías… ¿En qué te ayudo?

Le sonreí. Y le indiqué que haría, las cosas que logré hacer solo y lo que me falta. Jamás imaginé que en ese momento existiera alguien más, alguien que me escuchó, y que lo usaría en mi contra para dañarme.

[ ... ]
Detrás de la puerta estaba alguien más. Yon, quien al escuchar eso sonrió ampliamente, pues a Seo-Jun le encantaría esa noticia.

[ ... ]
Ran ahora ya había hablado con su hermano, las cartas estaban sobre la mesa, pero a escondidas, un juego nuevo había comenzado, y él no sabía que pertenecía a él. Pasaron los días y ____ cumplió los 7 meses. Todo parecía normal, hasta que algo llamó su atención, algo tan ordinario como un tatuaje.

Se levantó del sillón y llamo mochi.

Ran: hola michi~ cuánto tiempo ¿No crees? - trato de sonar amable.

Mochi: ve al grano, estoy de vacaciones. - y respondió seco el cabrón.

Ran: que suertudo… bueno, de casualidad no te darás por ahí, el contacto de alguno de los Kona, es que me urge hablar con ellos.

Mochi: no, pero por lo que entiendo están ahí contigo.

Ran: ¿Cómo?

Mochi: si, están en Chicago ¿No?

Ran: si, si, aquí estamos

Mochi: bueno, ellos están ahí, la casa en dónde estás ahora mismo, es mía, pregunta por ellos a los hombres de ahí mismo, de nada fresita~ -dijo en un tono burlón que sabía que molestaría a Ran.

Ran por otro lado, no pasó de solo soltar un quejidos y correr hacia donde los hombres de la casa y preguntar por los Kona.

X: Oh well, they almost always go to Laion's house
  (oh, bueno, casi siempre se van a la casa de Laion.)

Ran: And who is that?
¿Y ese quien es?

X: Ah, well Bonten's business partner, the boss has already died but I think his daughter took over, I think her name is… Seo…
(ah, pues el socio comercial de Bonten, ya se murió el jefe pero creo que su hija tomó el mando, creo que se llama… Seo…)

Ran: ¿Seo-Jun?

X: Come on, she, in fact, look…
(ándele, ella, de hecho mire..) - levantó su cabeza por arriba del hombro de Ran, apuntando sin señalar- Here it comes.
( Ahí viene )

Ran volteó hacia donde el hombre indicó y efectivamente, Seo-Jun venía hacia la casa, frunció el ceño y le agradeció al hombre, caminó a paso veloz hacia ella, ella lo noto y de inmediato se puso animada, pero él, no estaba nada contento.

Seo-Jun: ¡Raan~! Hola, veo que me extrañaste… - soltó en un tono coqueto mientras era arrastrada (casi), por Ran hacia dentro de la casa.

Después Ran entró con ella a una oficina y cerró la puerta.

Ran: ¿Que hacen los Kona en tu casa?

Seo-Jun: ¿Qué tiene? No me digas que… - se colgó de los hombros de Ran acercándose a él peligrosamente hablando con un tono coqueto -. ¿Estás celoso?

Ran: ¿Tu crees? - respondió de esa misma forma sosteniendo la cintura de Seo-Jun.

VIOLET EYES [RAN HAITANI] (SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora