Entre las paredes.

Capítulo XVIII.

Won Katly.

Termino de empacar unos postres en una canasta más grande a la que suelo siempre llevar, tomo está y salgo de la cocina, al pasar por la sala me detuve en el espejo que tenemos colgado en una de las paredes, me observo y reviso estar bien. Acomodo mis aretes, mi broche de Harry Potter y limpio mis labios del gloss regado.

—Vámonos—Le aviso a Dante, él asiente, se pone de pie, apaga la tv y me sigue fuera de la casa. Hoy iríamos a casa de los Towers. Teníamos un plan ingeniado por ambos, a veces considero que Rowan y Cass se complican demasiado, nosotros somos más relajados, y creo que por eso nos saldrá más rápido, mejor y efectivo. Nuestro plan era sencillo.

Paso 1. Ir a la casa Towers. Tenía una excusa del porque no había ido anteriormente, le dije a Loren que mi hermana estaba en casa y pasábamos tiempo juntas, tenía que fingir no estar al tanto de nada y continuar haciendo los creer que Cass y Rowan, no nos contaron nada. Por eso la invite ayer, fingimos que Rowan se fue, hasta la avisamos a mamá que ella estaba de visita por aquí, mi hermana mayor se estaba quedando en un pequeño hotel no tan lejos de nuestra casa, por eso ayer invite a mi vecina pelirroja, para que comprobara que Rowan no estaba, hasta la lleve a mi habitación para que pasáramos por la puerta abierta de la habitación vacía. Dante tenía que fingir que ya estaba interesado en Loren para acercarse, suena feo, pero la utilizaremos a ella, al final de cuentas, parece ser la más tonta y descuidada.

Un paquete en la puerta Towers bloqueaba nuestro paso, era una gran caja. De metiches, ambos nos inclinamos hacia adelante y examinamos el paquete por fuera, deduciendo mentalmente que podría haber dentro. Leí la etiqueta de envío.

Ostrandg. Boute il.

Avenida Illiteou.

Calle 156, Banheim.

Casa 256, Mansión Wagyerner.

Shaysvillle....

Wagyener...Caso Wagyener...

Miro a mi hermano a mi lado y él hace lo mismo, ambos pensamos igual. Fotografié rápidamente la postal. Seguido guardo mi celular y toco el timbre. Con una leve sonrisa falsa en mi rostro, esperamos pacientes hasta que la señora Towers (Nuestro objetivo) por suerte fue la que abrió. Dante tenía las manos en los bolsillos, repaso sutilmente a la señora Towers, quién sabe que cochinadas pensaba. Aunque no lo culpo, aún yo siendo heterosexual, sentía una oleada de atracción por esta mujer tan magnética.

—Niños —Luce sorprendida —Tenían días sin venir.

—Es que nuestra hermana vino, y estaba vez, raramente, quería pasar tiempo con nosotros, se fue antes de ayer. Así qué, ya estoy devuelta —Me incline para abrazarla.

Paso 2. Conseguir ADN de la señora T. ¿Cómo lo haríamos? Había opciones. La primera, un cabello, no es tan efectivo cómo la prueba de saliva, pero bueno...

Me puse unos aretes con una aguja larga, el cabello de Lorena era de gran longitud, y siempre caían mechones rebeldes por su rostro, aunque siempre lo llevaba amarrado. Hoy lo llevaba amarrado, así que sería difícil que uno de mis aretes se enredara con su cabello. Mi broche de Harry Potter era para lo mismo. Está opción estaba descartada, por el momento.

Al soltarnos del abrazo hablo nuevamente—Les traje tarta de fresa que hice está mañana. Un pedazo para cada uno —Lorena nos sonrío, miro el paquete detrás de nosotros y actúo con naturalidad. Justo cómo lo creíamos.

Paso 3. Debía buscar alguna prueba o señal de qué mi teoría era cierta, y existía un cuarto hermano, y esté sería el asesino. Esté sería aquel que persiguió a Rowan aquella noche, él sería él qué siempre veo en la ventana del ártico. Pensé dormía ahí, pero Rowan no vio nada que pudiera dar indicios de eso.