Parte 3.

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Narrado en tercera persona.

Rowan era la más "intacta" de sus tres hermanos, y es qué ella no dejaba que nadie la lastimara, luchaba contra cada uno, aunque eso costará acercarse y tratar de quitarle el arma, y lo había conseguido, le quito el cuchillo a Loren y con este mismo la lastimo lo suficiente para no dejar que está siga siendo un peligro.

De Aitana no salió tan ilesa, ambas tenían un temperamento fuerte y persistente, y la Towers se burlaba mentalmente de lo débil que era Rowan por ser una mortal, así qué le dio ventaja a cada uno de los Won al ir sin un arma más qué ella misma, y es qué así era, Aitana era energía pura, ella era una verdadera arma y aún con esa dosis que dejó sus poderes dormidos era aún más fuerte incluso que su hermano mellizo.

Y con eso fue suficiente para dejarla mal herida, por unos cuántos golpes y ese pensamiento intrusivo que no entendía la volvió a invadir "No maten a nadie".

Ella la dejo en el suelo, pensando que hacer ahora, ya se había vengado de Ax por lo de Cassandra, y podría matarla, eso lastimaría a su hermano, pero también a Cassandra, así qué bufo y se dio la vuelta para irse a seguir cazando a los otros o por lo menos encontrar a Cass y sacarla de aquí, si Rowan iba a morir, no iba a ser por que Aitana terminará el trabajo.

La Won estaba adolorida en el suelo, sintiendo cómo si la mayoría de sus huesos hubiesen sido partidos por un par de golpes, qué sin sentido se sentían cómo golpes de metal, no necesitaba verse para saber cómo debía estar su rostro, y no necesitaba chequear la fuente del dolor, porque sabía que si no corrió sangre, un morado se estaba formando.

Decidió dejarse caer y descansar unos segundos, para pensar qué hacer, se mentalizo no cerrar los ojos y encontrar a sus hermanos, ya había escuchado los gritos de Katly y Dante, sabía que estaban aquí, pero no tenía ni una señal de Cass, lo que la aterraba.

Repetía una y otra vez en su cabeza, Mis hermanos, mis hermanos, mis hermanos.

Mientras dos de ellos no se separaron ni un segundo desde que se encontraron, pero Dante fue gravemente herido por Mike cuándo se encontraron y Katly no pudo hacer nada, porque Mike se lo impidió y aunque la chica lo golpeara y jalaba, éste no cedía ni se movía un centímetro, era cómo una estatua qué repetía los golpes y con el cuchillo se encargo de hacerle una herida abierta en el rostro al coreano, burlándose de él y diciéndole cosas que Katly no entendía, pero Dante sí, y no sé podía creer el odio de los dos hermanos mayores de Loren hacia a él.

Katly al final fue sostenida por Ax para alejarla de Mike.

—Michael, suficiente—Dijo el mayor al creer que ya el chico estaba suficientemente herido y que era una gran paliza merecida.

Dante en ocasiones fue cruel con Loren, hiriendo con palabras y hasta acciones y está se desahogaba con sus hermanos, y estos le tomaron mala voluntad a Dante, porque el chico no sabía que quería con su hermana y sólo la lastimaba, ambos le tenían mala riña.

Y para ser sinceros, los Towers odiaban a todos los Won, excepto a Katly, y era algo que nunca cambiaría, la coreana era muy buena, y un pastel de fresa dulce y suave, les parecía un alma pura y les encantaba qué la chica nunca se metiera en sus asuntos de manera tan intensa cómo sus dos hermanas mayores y mejor, que nunca lastimo a Mike cómo lo hizo Dante y Cass.

En verdad, Katly era buena, pero no quita que estuviese usando a Mike en parte cómo un pasaje de entrada a la casa Towers y así era los ojos de Rowan desde adentro, lo que sucede es que ella sabía camuflar sus intenciones y lo que hacía, esa fachada de buena niña, la ayudaba bastante, Aitana era la única que notaba lo que hacía y aún así  prefería culpar a Rowan.

Al final todo queda así, los Won en un hilo de dolor dónde no saben si están vivos o muriendo, un hilo qué está por romperse, y un final, desgraciado, no feliz, no cerrado, ni conclusivo. Un final abierto a lo peor.




-Fin.

***

Be quiet. Falta el epílogo, todo va estar bien. Tranquilos, tranquilos, tranquilos. Reciban paz, los amo.

~᥊ꪮ᥊ꪮ ꪶꫀꪀꪗ

Entre las paredes. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora