A TRAVES DEL TIEMPO - [ZHANYI]

CAPITULO 38

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(Música: only piano de Adrian von Ziegler - Loneliness.)

Zhan se mecía lentamente en el centro la cama mientras abrazaba a su esposo en la oscuridad de su recamara, no sabia ni le importaba saber cuantas horas habían trascurrido desde que los dejaron solos.....el poco calor que emitía el cuerpo de Yibo había desaparecido completamente, la palidez era cada vez mas notorio en su rostro y en el resto de su cuerpo.

—mi amor.....—Zhan susurro suavemente con el rostro cubierto de lagrimas mirando detenidamente el rostro pacifico de su esposo:—Yibo....abre tus ojos cariño, aun no te vayas...no me dejes todavía....—hablaba lentamente llorando cada vez mas fuerte:—no voy a poder seguir adelante...¡No sin ti!....—se inclino y beso con dulzura los labios pálidos de su esposo:—¡¿Como es posible que no me haya dado cuenta?!....¡Despierta cariño!, deja de dormir por favor....—oculto su rostro en el cuello de Yibo y acaricio con ternura su espalda:—no me dejes, no me dejes solo....prometimos estar siempre juntos uno a lado del otro, ¿Realmente no lo vas a cumplir?, Por favor...por favor abre tus ojos...aun no hicimos todas las cosas que prometimos hacer, aun nos falta muchas cosas por vivir.....

Se cubrió los ojos con su mano derecha sintiendo cada vez mas desesperación y dolor...un dolor tan profundo que lo estaba destrozando completamente:—¡¡YIBOOOOO LAVANTATEEEEEE!!, NO ME DEJES, NO ME DEJES,....¡¡¡POR FAVOR NO LO HAGASSS!!!....—al asimilar poco a poco que su esposo ya no despertaría nunca mas....ni mucho menos volvería a escuchar su voz, el dolor se hizo cada vez mas grande:—NO, NO, NO, POR FAVOR DIOS NO ME LO QUITES,......NO ME LO QUITES........¡¡¡¡NOOOOOO!! AAAAAAAAAAH!!!....AAAAAAAAGkHHHH!!.......—sus gritos retumbaban en toda la recamara y fuera de esta sin piedad.

Zhan lloro por horas......lloro hasta que las lagrimas ya no pudieron salir mas de sus lastimados y rojizos ojos, lloro hasta perder la voz y quedar totalmente afónico, lloro queriendo morir en ese mismo momento y seguir a su amado...

No dejo de abrazar a su esposo como se lo prometió esa noche incluso hasta ahora, se encontraba totalmente absorto en sus pensamientos....recordando la ultima conversación que tuvo con Yibo, sin saber que esa seria la ultima vez que ambos hablarían, recordaba una y otra vez todo lo que hicieron el ultimo día, lo feliz y sonriente que se encontraba...los pequeños gestos o palabras que decía como si se hubiera despedido indirectamente de todos, no dejo de pensar en ello, martirizándose sin dejar de echarse la culpa por no haber estado despierto como últimamente lo hacia, porque tal vez...tal vez podía haber hecho algo cuando Yibo dejo de respirar, tal vez aun estaría vivo si no se hubiera dormido profundamente, se repetía una y otra vez...

(Música: E.N.D.)

—Perdóname, perdóname mi amor.—Zhan susurró débilmente, su voz era ronca debido al llanto que no cesaba, beso tiernamente la frente fría de su esposo y dijo:—no pude hacer nada, no pude cumplir ninguna de mis promesas....no pude salvarte.....

Las horas siguieron transcurriendo lentamente, el día fue reemplazado por una noche fría y oscura...la cual fue muy larga. Todo el palacio estaba sumido en un silencio sepulcral, las risas que alguna vez abundaban por los diversos pasillos y jardines del Palacio Cerrado, fueron reemplazados por llantos...sollozos...gritos y maldiciones de aquellos que no aceptaban la triste realidad.

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La puerta principal de la recamara del séptimo príncipe se abrió lentamente dejando ver al Emperador Wang acompañado de Tai y de una tercera persona mas, este ultimo se quebranto al ver el estado del general imperial del Norte.

El Emperador Wang camino dirigiéndose a Zhan, quien había permanecido en la misma posición de loto, abrazando el cuerpo de su hijo todo el día y la noche. Con el corazón destrozado por la imagen tan desgarradora que veía...donde podía confirmar con su vida, el amor incondicional que su yerno llego a sentir por su hijo, y que seguramente sentiría por el resto de su vida.