Omega de oro

C23

De regreso al campus, la vida volvió rápidamente a su ritmo habitual, pero algo había cambiado. Después de la aceptación por parte de los padres de Bill, cualquier duda o inseguridad que hubiera podido existir se había desvanecido.

Los primeros días después de su regreso, ambos notaron que los compañeros de universidad, que ya habían empezado a hablar sobre la relación después del incidente con Liam, ahora los miraban con aún más curiosidad, cuchicheando entre ellos. Sin embargo, en lugar de sentirse incómodos, Bill y Ford decidieron que no tenían nada de qué avergonzarse.

Empezaron a ser más abiertos y afectuosos en público. Caminaban tomados de la mano por los pasillos de la universidad y no dudaban en compartir uno o dos besos cuando se despedían para ir a clases. Su relación era evidente, y la reacción de sus compañeros fue mayoritariamente positiva. 

Pyronica y Fiddleford, quienes ya estaban al tanto de todo, como siempre, no desaprovecharon la oportunidad de molestar a Ford en cada oportunidad que tenían.

—¡Mira quiénes llegaron! — Pyronica cada vez que los veía acercarse, siempre con un tono exagerado—. ¡La pareja del año! ¡No, del siglo! ¡No, de toda la historia!

Fiddleford no se quedaba atrás, agregando comentarios que hacían reír a todos menos a Ford, quien inevitablemente terminaba sonrojado.

—Ford, amigo, creo que necesitamos una dosis de tu seriedad científica. Pero quién sabe, tal vez sea un cambio agradable ver a nuestro genio en su papel de romántico empedernido —decía entre risas, palmeando a Ford en la espalda.

—Gracias, chicos —solía decir Bill con su habitual actitud despreocupada y segura—. Estoy totalmente de acuerdo con ustedes. No todos los días encuentras a alguien que te deje ganar voluntariamente en el ajedrez, como Ford.

El nombrado al escuchar eso, no pudo evitar reclamar— ¡Yo no te dejé ganar! Me ganaste porque hiciste trampa. —Bill, con una sonrisa traviesa, lo desafió— Si es así, diles cómo lo hice.

El rostro del alfa se puso al rojo vivo, incapaz de seguir la conversación. No dijo nada, lo que provocó risas entre sus amigos. El sonrojo evidente solo añadió leña al fuego, y las burlas comenzaron de nuevo, llenando el ambiente de bromas.

Ford intentaba desviar la atención torpemente, pero cada intento solo hacía que la situación resultara más cómica para los demás, quienes no podían contener la carcajada ante su evidente incomodidad.

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Una tarde, mientras caminaban por el campus después de clases, Bill se detuvo de repente y se giró hacia Ford.

—Sabes, si alguien me hubiera dicho hace un año que estaría aquí, tomado de la mano con un alfa un año menor que yo, sin preocuparme por lo que piensen los demás, y que mis padres lo aceptarían… —Bill hizo una pausa, sonriendo con un toque de incredulidad—. No lo habría creído.

Ford sonrió y apretó su mano con más fuerza. —Tampoco yo, pero aquí estamos. Y no cambiaría nada de esto. Ahora solo falta que conozcas a mi familia.

—Conocer a tu familia... —Bill se quedó pensativo, dándose cuenta de que había llegado ese momento. A lo largo de su relación, había superado tantos miedos e inseguridades, y todo gracias a la estabilidad y al amor que Ford le brindaba.

Bill lo miró con una ternura que solo Ford podía evocar en él. No necesitaba decir mucho; con una suave inclinación de cabeza, le hizo saber que estaba listo, aunque no lo estuviera. Sabía que el camino no siempre sería fácil, pero estaba dispuesto a recorrerlo con Ford, sin importar lo que el futuro les trajera.

Ambos continuaron su caminata, más seguros que nunca de que su relación era algo por lo que valía la pena luchar y proteger. Y así, tomados de la mano, enfrentarán juntos los días venideros, con la certeza de que el amor que compartían era lo suficientemente fuerte para superar cualquier obstáculo... ¿Cierto?..

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Holaa
Aquí está el otro cap, aunque sea de relleno y corto.
Espero que les guste ✨