Charlotte siempre fue tratada como "la chica fea", sus familiares, amigos y conocidos solían discriminarla por su apariencia.
En el transcurso de los años aprendió a vivir con eso, mejor dicho, a aceptar que era una "chica fea", ganándose un mal tra...
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Eran las 3 de la tarde, Engfa caminaba hacia un restaurante. El entrenador de basquetbol le había llamado diciéndole que tenían que reunirse, ya que tenía una noticia muy importante para ella.
Engfa finalmente entró al restaurante y buscó con su mirada al entrenador, este al ver a Engfa alzó su mano para llamar su atención y Engfa se acercó a su mesa.
—¡Hola Engfa! —dijo el entrenador sonriente mientras se levantaba de la silla para saludarla.
—Hola, coach —dijo Engfa abrazándolo. El hombre que vestía de traje y acompañaba al coach se levantó de la mesa para recibir a Engfa.
—Engfa, te presento a Steve Kerr —dijo el entrenador y Engfa fijó su mirada en el señor que la miraba sonriente.
—Mucho gusto, señor Steve —dijo Engfa tomando la mano de este en forma de saludo.
—El placer es mío, al fin puedo conocerte, Engfa —dijo Steve sonriente. Era un señor de 51 años, vestía muy elegante y parecía de mucho dinero.
—Tomemos asiento, para platicar mejor —dijo Steve y estos asintieron mientras se sentaban.
—Engfa, ¿quieres pedir algo de tomar? Todo va por mi cuenta —dijo Steve amablemente.
—Estoy bien... gracias —dijo Engfa y este asintió.
—Bueno, te debes de estar preguntando por qué estás aquí —dijo Steve y Engfa asintió.
—Bueno, me presentaré correctamente, no sé si lo sepas... pero fui jugador de baloncesto en el equipo Warriors estadounidense, ¿los conoces? —dijo Steve y Engfa abrió sus ojos.
—¡¿Qué?! ¡Claro que los conozco! ¡Son uno de los mejores en la historia del baloncesto!—dijo Engfa emocionada y este sonrió.
—Actualmente, soy el entrenador del equipo... Y hace mucho estaba interesado en ti, gracias a tu entrenador pude encontrarte —dijo Steve.
—Snack, Aoom y Meena me ayudaron, tus amigas me consiguieron videos tuyos jugando... así que se los mandé a Steve —dijo el entrenador. Engfa intentaba procesar todo lo que estaba sucediendo.
—Engfa, te quiero en mi equipo. Tienes mucho potencial, te he visto en videos y además he podido apreciar tus habilidades en vivo, pienso que serías un buen integrante en nuestro equipo femenino —dijo Steve.
—Entrenador, ¿estoy soñando? ¿Esto es una broma o algo así? —preguntó Engfa sin poder creer nada y Steve soltó una pequeña carcajada por la reacción de la castaña.
—Engfa, está sucediendo, ahora mismo —dijo el entrenador orgulloso. Engfa soltó un gran suspiro intentando respirar bien y miró fijamente a Steve.
