Libro 1 de la Saga Penumbra
En medio de sombras ancestrales y lealtades cruzadas, Aitana despierta en un laberinto de identidades entrelazadas. Criada por la oscuridad de dos mundos opuestos, se embarca en una danza mortal por ascender en un imperio...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Estoy cansado. Después de pasar más de cinco horas, salgo de la reunión en donde el actual líder, estaba distribuyendo los puestos para la siguiente generación, o sea, la mía.
Cumplí uno de mis mayores objetivos, hacer que le quitaran el puesto que más anhelaba a Aitana. Solo pienso en imaginar en cómo reaccionará cuando se entere, que sepa que lo que más luchó, fue arrebatado.
Nadie la mandó a apoyar a la puta traidora de Sabrina.
Ambas tienen la entrada prohibida a Estados Unidos, a menos que quieran ser bombardeadas en su totalidad.
Ignorando a todo aquel que me pase por el lado, me alisto para dirigirme a la última carrera de motos.
Llego, a lo lejos visualizo a Nicholas, se ve tan patético en su estado deprimido.
Perdió a su noviecita, sigue en un estado de negación, no cree que ella haya podido hacer eso. A nadie le importa lo que sienta.
Abby y Hannah están de un lado con las chaquetas que las identifican.
A pesar de que las carreras son cada tres semanas, di la orden para que se hicieran en el menor tiempo posible, no quiero ninguna sorpresa.
Las dos chicas no lo pensaron dos veces al cambiarse de equipo, y aunque a estas alturas de la competencia es algo imposible, lo hice, es mi mafia y yo si puedo hacerlo.
Ya en la última fase quedamos solo nosotros y el equipo morado, equipo con el que vamos empatados, ya que Aitana perdió la última carrera que hizo.
La carrera empieza con Nicholas enfrentándose contra un chico que no reconozco, tampoco me esfuerzo en recordarlo.
Se ubican en la línea de salida, Nicholas se inclina sobre su moto para revisarla por última vez.
A su lado, está el hombre irreconocible, el cuál trata de mostrar serenidad.
Después de unos minutos, el disparo correspondiente suena, lo que provoca que ambos motores rujan, dando así, inicio a la carrera.
Nicholas con una precisión casi robótica, acelera desde el inicio, tomando la delantera en cuestión de segundos. Su moto, perfectamente equilibrada, corta el aire con facilidad, dejando una nube de polvo detrás.
El otro chico, aunque es determinado, se ve que le falta todavía bastante práctica, aún así, lucha por mantener el ritmo.
En cada curva parece perder un poco el control.
Nicholas mientras tanto, se mueve con una fluidez impresionante, tomando cada curva y giro como si fuera una simple cosa.
A medida que avanza la carrera, la diferencia se va haciendo tangible.
Nicholas parece poco preocupado, sabe que la victoria será para él.
Finalmente, Nicholas cruza la línea de meta con una amplia ventaja. Dando así, una victoria más para nuestro equipo.
