Harry Addams

52

El sonido de los perros ladrando lo despertaron a eso de las 2 de la madrugada.

Will Graham que habia vivido y había estado casado con el temible Hannibal Lecter, el canibal, tenia suficiente experiencia como para saber que alguien se habia metido en su casa.

Con su arma cargada bajo la cama, se tomo el tiempo necesario para escuchar como todos y cada uno de sus perros se callaban de uno en uno. Cuando todo quedo en silencio una vez mas, puso escuchar el sonido de una respirancion frente a su cama.

Sin pensarlo dos veces, saco su arma y disparo hacia adelante, escucho como las balas impactaban con la carne de alguien y el olor a sangre comenzaba a llenar la habitacion.

De repente un dolor le hiso temblar, ahi en su abdomen, en el mismo lugar donde su Hannibal lo habia apuñalado años atras, se clavaba una daga bañada en oro, con bonitas incrustaciones de diamantes.

-jajajajjajajajaj, que divertido, que divertido, juego a la muerte con uno de mis tíos -canto una voz dulce y melodiosa -en una casa llena de canes, el lobo juega y la sangre cae

De las sombras una niña con un vestido negro que comenzaba a mancharse por la sangre que salia de su abdomen, cantaba alegren mientras daba saltitos hacia el.

Will no pudo evitar pensar que la niña se parecia un poco a el, cabello negro  ojos verdes bajo unos lentes dorados, pero tenia esa curiosa chispa que su marido solia tener en vida, una chispa demente, pero sigilosa, aterradora, pero al mismo tiempo cautivadora.

La niña con el gran vestido negro y un sobrerito de le hacian recuerdo al de las brujas, medias con figuras de huesos y zapatos altos, bailaba por toda la habitacion cantando.

-dos balas me dieron, una hemorragia ahora tengo, en la casa del canibal, ya me muero

-¿que dijiste?

Pregunto ante la ultima oracion de la cancion, pero la niña seguia emocionada bailando, estaba por disparar otra vez cuando vio como un lobo, enorme, mas grande que sus perros entraba corriendo y saltaba sobre la niña.

-Luni, Luni mira es el esposo del tio Hannibal, no es lindo, mira incluso me disparo un par de veces -dijo el menor apuntando a su abdomen

-¿tio Hannibal?

-oh lo siento no me presente, soy Harrieth Addams-Potter, antes llamado Harry James Potter Evans, soy bisnieto de Mischa Lecter

Bien eso era nuevo.

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Hannibal paseaba por los oscuros caminos llenos de gritos y lamentos de los campos Asfoldeos.

Deleitandose con las toruras hechas a aquellas almas negras y malvadas, que se merecian todo ese sufrimiento, entre ellos habian varias de sus victimas y uno que otro paciente.

A todo eso ¿porque el no era torturado? Muy facil, apesar de que Hannibal era un asecino y se comia a la mayoria de sus victimas, no todas tenian buen sabor, sus pecados no eran tan malos como para que mereciera un castigo... bueno si lo eran, pero realizar todo el papeleo que con llevaba para que el reciba era mucho trabajo, así que lo dejaron de lado.

Nunca mato a gente inocente... creo, todas sus victimas eran personas muy malas y sin escrupulos que debian de ser eliminadas de la tierra... a su parecer, por eso los jueces le habian dado un castigo minimo, evitando así el papeleo, una vez a la semana tenia que ser  abierto y comido por las arpias.

No era tan malo, el hombre con cabellos entre rubio y castaño ya estaba acostumbrado, sus ojos azules recorrieron todo el arido lugar mirando interesado los medios de tortura, pero ninguno era de su agrado.

Suspirando dio media vuelta y regreso al pequeño claro que le pertenecia, preguntandose como se encontraban su hija y su pareja, por su lado paso corriendo de sus toruradores el alma de su pequeña hermana.

Hannibal nunca penso que su la causa de su mayor trauma, su hermana, jasmas hubiese muerto en realidad, si los soldados aquel maldito dia se la comieron, pero no por completo, le faltaba un poco de piel y carne, pero seguia con vida.

Mischa viva y mutilada, desesperada por no morir, decidio que se aferraria a uno de los soldados, durante años ella fue su esclava sexual, dejando de lado a su traumatisado hermano.

Cuando quedo embarazada y pudo recolectar el dinero suficiente escapo muy lejos y dio a luz a una niña a la cual prostituiria para pagar sus vicios, Margareth Lecter, que años despues se casaria con Logan Evans quien la sacaria de esa mala vida y la amaria hasta su ultimo suspiro y al final daria a luz a Petunia y Lily Evans.

Hannibal miro despectibamente al alma de su hermana y siguio su camino sin importarle, recordaba que una vez, unos años antes de que lo mataran, el trato de conocer a su familia, su hermana era una drogadicta agresiva asi que lo recivio de manera nada agradable, hechandole la culpa de todo y tratando de atacarlo.

Por otro lado su sobrina Margareth, lo recibio con un abrazo, durante unos dias se quedo con ella y su familia dandose cuenta que si bien ella amaba a sus dos hijas, ponia sobre todo antes a la menor peli roja, Lily.

Fue esa niña malcriada y creida la que hiso que su sobrina lo sacar de su vida.

No supo como lo hiso o como lo descubrio, pero fue Lily quien lo delato como el Destripador de Chesapeake, lo que lo llevo a huir durante unos años, dejando atras a su esposo e hija.

Al final murio debido a una lluvia de balas, sin poder siquiera despedirse de su lindo Will.

De la nada empeso a escuchar una voz, una voz delicada y cargada de locura y maldad que lo llamaba, a esta le siguio la dulce voz de su esposo.

"¿Hannibal?"

Su nombre hiso eco en el lugar y una luz aparecio frente suyo, de esa luz salian ambas voces, sin pensarlo se adentro en esta y el brillo lo sego un momento.

Cuando abrio los ojos, lo primero que vio fue  a su esposo y a su hija, los dos tomados de la mano frente a una mesa donde habia una bola de cristal.

Los años habian pasado obviamente, la cara de su Will estaba llena de arrugas y su cabello negro ya casi era consumido por las canas blancas, pero sus ojos aun tenian esa vitalidad de siempre.

-Will

-Hannibal -susurro soprendido

-hola tio -Hannibal se dio la vuelta y vio a una niña parecida a  su esposo agarrado de la mano de ambos

-es el bisnieto de Mischa, el te llamo desde ¿el inframundo? -dudo de sus palabras Abigail

Eso era interesante, Hannibal mira a la linda niña que le sonreia emocionado y al hombre de ojos dorados que habia detras de ella.

-oh ¿y para que me llamaste si se puede saber? A Hades no le gustara saber que perdio una alma de la nada

-oh nada importante, solo me entere que eras mi tio y queria saber si quieres volver a la vida -Hannibal levanto una de sus cejas

-¿como haras eso? Si puedo saber

-oh tengo mis medios -dijo Harry y Remus dejo sobre la mesa una piedra roja - se como revivir gente....

Canturreo alegre, si Hannibal no esperaba eso.