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Montreal, Canadá, 09 de Julio del 2024.
AUTUMN
Estaba terminando de colocarme la misma gorra que he estado usando los últimos tres días, me gustaba como combinaba con la ropa que estaba usando. Últimamente tomaba un poco más de esfuerzo en elegir la ropa que vestía sólo porque no quiero verme rara en las fotos que salgan en Internet.
Estos días nos habían estado tomando una cantidad increíble de fotos, las fans de Charles estaban emocionadas de volver a verme. Otras se acercaban a pedirme una foto o simplemente a preguntar como estaba, mis amigos estaban sorprendidos de la manera que me querían e igual yo también lo estaba. Me gustaba que algunas se acercaban a mi para felicitarme por la galería, me contaban que las pinturas que había hecho les gustaba y que estaba siendo una inspiración para algunas.
Mis amigos estaban esperándome en el lobby para irnos en el coche con Charles, él nos propuso llevarnos por lo que terminaron aceptando aunque a mi se me hacía algo extraño. Charles en la práctica 2 había quedado en el cuarto lugar, parecía que iba en buen camino pero ayer en la práctica 3 quedó en el puesto 10 y en la clasificación en el lugar 11. Estaba algo desanimado, y aún así intentó ser amable con mis amigos. No voy a mentir que consideré que iba a terminar mal, sin embargo, se mantuvo con una mentalidad increíble que me dejó bastante contenta.
Tomé mis cosas saliendo de la habitación, escuché como la puerta a un lado se abria y salía el monegasco. Estaba bastante distraído, sonreí viendo que tenia la camisa al revés además que parecía buscando algo. Tocaba su pantalón con desesperación haciéndome reír y el me mirara confundido.
—¿Qué buscas, Leclerc?
—Mis lentes de sol, no se qué los hice ¡Los tenia en la mano! —me acerqué a él viendo sus lentes sobre su cabeza que no había notado.— ¿Qué haces? —su voz estaba temblorosa.
—No se cae tu cabeza porqué esta pegada. —quité los lentes y se los extendi, el miró confundido mis acciones hasta que vio lo que buscaba suspirando.— ¿Estás bien? Tienes la camisa al revés
—Si...—alcé una ceja sin creerle.— Bien, no estoy bien, pero, estaré bien. —rascó su cuello ansioso, luego vio su camisa y suspiró. —Cierra los ojos. —me reí obedeciendo.
—Te irá bien en la carrera, y si en todo caso no fuera así. No dejes que eso baje tus ánimos, eres un buen piloto, Charles. —sonrió cuando ya abrí los ojos viendo que habia corregido su camisa.— Vamos, que seguro Stella está desesperada de estar abajo.
Nos subimos al elevador en silencio, últimamente éste tipo de silencios con él se estaban volviendo algo repetitivos. No digo que me moleste, pero muchas veces siento que tal vez ya hablamos tanto que no tenemos nada en común para hablar y...
—¿Quieres salir hoy en la noche? —se colocó frente de mí.— Ya sabes, siendo como Olivia y Jackson. —estaba nervioso, lo podía saber por la forma que sus dedos estaban jugando entre ellos.— Sólo estarás una semana más aquí y pensé que podría ser divertido aprovechar los días para salir antes que regreses a Mónaco.
