𝖼𝖺𝗉𝗂́𝗍𝗎𝗅𝗈 𝟣𝟫

3.9K 257 15
                                    

Miami, Estados Unidos, 25 de Junio del 2024

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Miami, Estados Unidos, 25 de Junio del 2024.

AUTUMN

Abrí los ojos soltando un bostezo, estiré mi cuerpo sintiéndolo algo adolorido. No recordaba haber dormido así de bien en años, aún así que estaba con dolor en el suelo. Me sentía bastante descansada, una sonrisa apareció en mí rostro viendo a la ventana. Me deshice la coleta para re hacerla volviendo a soltar un bostezo, me volteé viendo el cuerpo de alguien a mi lado y chillé.

—Buenos dias a ti también, chéri —la voz ronca de Charles me hizo reaccionar— ¿Así despiertas a todo mundo? —se río un poco teniendo una mirada somnolienta.

—Por dios, había olvidado que estabas aquí. —toqué mi pecho recuperando el aliento.— ¿En qué momento terminamos durmiendo juntos? Recuerdo que habíamos puesto una barrera de almohadas para dormir separados.

—¿De verdad esperabas que la barrera nos separara? Linda, te mueves mucho para dormir. —se burló.— No recordaba que solías mover el pie en la noche para dormir.

—Cállate. —desvíe la mirada sintiendo mis mejillas calentarse.— ¿Dormiste bien?

—Fantástico.—río.— ¿Tienes planes hoy? —negué con la cabeza.— ¿Te parece bien ir a la playa?

—¿A la playa? ¿Un lugar que es mega público? ¿En Florida? —me burle.— Chaz, deberías de buscar planes más disimulados.

—Siempre podemos ir como Olivia y Jackson. —mencionó sentándose a un lado.— Nadie sabría que somos nosotros.

—No podrías meter la cabeza al mar por la peluca, Leclerc. —se río.— Va a salir flotando y serás burla de toda la parrilla. —bromeé.

—¿Quién dijo que debíamos nadar? —frunci el ceño.— Chéri, tengo contactos en todos lados. Podríamos alquilar una casa de playa para nosotros y estar en ella unos días antes que regrese para la carrera de Austria.

—No lo sé. —el pensamiento de Alexandra se hizo presente, miré mis manos nerviosa.— Quisiera, de verdad que sí pero, no creo que sea correcto. —murmuré.— Lo siento.

—Hey. —tomó mi mentón volteando a verlo.— Está bien, lo entiendo de hecho. —sonrió.— Podemos hacer algo que te haga sentir cómoda, sólo no quiero que te sientas presionada conmigo. —sonrió.

—¿Qué hora es? —pregunté buscando mi celular.

—Las dos de la tarde. —me enseñó el celular con la hora.— Dormimos muchas horas, por dios.

—Llevaba bastante tiempo sin dormir una noche entera. —mencioné.— La única manera que lo hago es cuando estoy ebria, me duermo como una bebé pero estando sobria me cuesta.

—¿No has podido dormir? —negué.— ¿Por qué?

—No lo sé, el insomnio ha sido mi amigo hace un tiempo. —coloqué las manos en las sábanas apretando de ellas un poco.— Supongo que la inspiración no ayuda, realmente.

𝗍𝗈𝗋𝗇𝖺𝖽𝗈 𝗐𝖺𝗋𝗇𝗂𝗇𝗀𝗌 ⎯   𝗳𝟭 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora