Chris Evans - One Shots

La mujer que me hipnotizó (43)

Ya cumplía una semana en ir al lugar donde bailaban las chicas, bailaban en mini falda, portaban sostén o vestian de un conjunto totalmente negro, donde se les veía su cuerpo había una en especial que me llamaba la atención, ella tenía el cabello negro, largo hasta la cintura, siempre llevaba un antifaz aveces llevaba minifaldas con una blusa cortita, se le marcaban los pezones o salía a bailar con sosten y una braga, tenía un buen trasero, se veian sus perfectos pechos y redondos, se veía muy atractivos, sus ojos al verlos apesar del antifaz que tenía, sus ojos se veian penetrantes y bonitos, no alcanzaba a ver el color se estos, Antony y yo siempre llegábamos cuando había más gente, era donde ella salía con sus tacones, bailaba en el tubo y todos la aplaudían, y es que como no hacerlo si era hermosa, atraía mucho a los hombres, incluyéndome, cada que venía era para verla, para apreciarla, para ver cómo bailaba.
Se acercaba a mí, yo estaba sentado en mi lugar y a lado Antony, él sonreía mientras tomaba de su whisky, la mujer me estaba bailando, recargué mis manos en el sillón y dejé que me hiciera lo que ella quisiera.
Ponía su trasero en mi abdomen bajo, no dejaba de bailar, desacomodaba su cabello, lucía tan sexy, tan provocativa, su olor natural su perfume de vainilla, se pegaba a mí, su espalda pegaba con mi pecho, se volteó para quedar frente a frente, sentí su mano en mi pecho y cómo subía a mi mandíbula, agarraba de esta mientras me lamía la mejilla, de pronto llevó sus manos a su espalda, se empezaba a quitar el sostén, mi instinto hizo llevar mis manos atrás de su espalda, no quería que se lo quitara, muy en el fondo sí pero no quería que los demás hombres la vieran, ella río al darse cuenta de mi acción.
- Tranquilo, ni siquiera tú las verás - Dijo y yo quité muy lentamente mis manos de su sostén, ella terminó quitándoselo, yo tragué saliva cuando lo hizo, ella seguía bailando para mí, llevó una de sus manos para taparse los pezones, su otra mano jugaba con su sostén, le daba vueltas para que al final saliera volando.
Terminando la canción se había ido de mi lugar, mi pene estaba completamente duro y levantado, me agarré la cara, me había gustado lo que había pasado, esta mujer me prendía, sabía como excitarme, me esperé un momento para que se me bajara la excitación, me tomé el trago que había pedido y me levanté de la mesa para ir a buscarla.

- Hola guapo- Dijo la mujer que estaba en la barra quería saber que quería, yo no sabía que decirle.
- Estoy buscando a la chica que acaba de bailar - Dije y ella me contestó.
- ¿_________? - Preguntó y yo no estaba tan seguro pero asentí sin más y ella se bajó de su asiento, caminó hacia los camerinos, yo atrás de ella, llegamos a una habitación donde la puerta estaba cerrada, la mujer tocó la puerta, le decía a la mujer que la buscaba un hombre alto y guapo, habia hecho enfasis en donde yo tenía mucha curiosidad en conocerla, y era la verdad, no decía ninguna mentira.
La mujer se fue y me dijo que iba a salir en un momento, yo me sentía nervioso, mis manos me sudaban, las chicas que se maquillaban me miraban y yo solo ocultaba mis manos en los bolsillos.
Había esperado alrededor de dos minutos, la mujer había abierto la puerta, ella seguía teniendo la ropa que había usado para bailar, yo suspiré.
- Hola, qué tal - Decía ella y yo tragué saliva, seguía nervioso.
- Hola, ah... me acabas de bailar hace un momento - Reí y ella me miraba un poco seria.
- La verdad es que ya he estado viniendo aquí, solo vengo a verte, te me haces muy bonita y quisiera saber si quieres salir conmigo, tomar algo, ir a donde tú quieras - Terminé de hablar pero ella se recargaba en su puerta, cruzaba de brazos y seguía seria.
- No puedo, no tengo interés y no salgo con los hombres a quien les bailo, si eso era todo, ahora disculpame - Ella terminó de decir mientras caminaba a su habitación, estaba por cerrar la puerta y yo no dejé que lo hiciera.
- Disculpa, espera, la verdad es que tengo mucha curiosidad en conocerte, quiero conocerte más, que me des la oportunidad de tratarte - Ella me miraba pero no se veía tan convencida.
Ella estaba a punto de decir que no pero yo volví a insistir y al final aceptó.

Habíamos quedado en vernos en un restaurante, este era lujoso, no había querido que fuera por ella así que la esperaba dentro de este, alrededor de 5 minutos fue mi espera que ella llegó, se veía más hermosa que nunca, tenía un vestido azul largo, y una abertura en su pierna, su vestido era de brillos, sus mechones de cabello caían por ambos lados de su sien, yo me paré para recibirla, y tenía conmigo un ramo de gerberas.
Me dio un beso en la mejilla y la ayudé para que se sentara.
El mesero llegó con nosotros, le encargaba un vino y lo que íbamos a cenar.

- Está precioso el lugar - Ella miraba las luces, todo lo que estaba alrededor.
- Si lo deseas se puede convertir en tu lugar favorito, siempre y cuando me aceptes que te invite - Dije mientras acomodaba mi corbata, ella bajó la mirada.
- ¿Dije algo malo? - Pregunté pero ella guardó silencio por un momento y después negó.
- Solo quiero decirte que si este es tu método para llevarme a la cama, estas muy equivocado - Decía ella y yo no sabía qué decirle, por supuesto que no era mi idea.
- Solo quiero conocerte, si se da algo, perfecto, sino está bien, solo me pareciste preciosa, atractiva, eres muy hermosa, yo creo que me enamoré solo con verte - Ella me miraba y se le podía notar una pequeña y leve sonrisa, comenzamos a cenar y a platicar de nosotros.

Al final quise llevarla a casa pero ella no quería, no le insistí, no quería incomodarla, le dije que si en estos dias me aceptaba una salida, ella no se veía tan segura en aceptar pero la convencí.
Ella me dio su número y me despedí de ella agradeciéndole que viniera conmigo a cenar.

Así casi todas las noches que podía venía a verla con un ramo de flores, me esperaba hasta el último para poder pasar a su camerino para dárselas.

- Bueno me parece entonces que si vas en serio con ella - Antony me decía mientras salíamos del club, yo suspiré como un tonto enamorado.
- Es un poco difícil, pero estoy logrando que me acepte las salidas - Dije y él se me puso enfrente.
- Si es en serio todo esto tienes que decirle la verdad, tienes que ser sincero, o acabar esto de una buena vez porque.... - Yo lo interrumpí.
- Sí lo sé - Dije y suspiré, nos fuimos en mi camioneta.