Diabólica tentación (Billdip) #PremiosGravity2023

EXTRA - FINAL

— Y así fue como su padre secuestró a mi hermanito — una castaña yacía sentada en una silla platicando alegremente junto a una enorme cuna que era la cómplice del descanso de dos hermosos bebés

— Estrella Fugaz, deja de contarles esas cosas, creerán que es cierto — Un rubio ojeroso se asomó por el marco de la puerta de la habitación tratando de susurrar lo más bajo posible para evitar que los pequeños despertaran, algo que no funcionó del todo pues uno de ellos comenzó a removerse en un intento por sollozar

Mabel tomó el borde de la cuna y comenzó a mecerla con suavidad haciéndolo dormir nuevamente, no sin antes sonreírle en grande a su nuevo acompañante — Tienen apenas unos meses, no creo que recuerden lo que se les dice a esta edad

— Los demonios recordamos todo desde nuestro nacimiento — alegó frotándose sus cansados ojos mientras se acercaba a pasos lentos y sigilosos para mirar de cerca

— Pero los humanos no, así que no empieces de paranoico — Cipher se limitó a sonreír levemente antes de acariciar el rostro de uno de los pequeños durmientes — Recuérdame porqué me pidieron que los cuidara si ambos están aquí

— Tenemos que dar las gracias apropiadamente

La castaña asintió y regresó a su tarea como niñera. Pero para entrar un poco en contexto, debemos regresar sólo un par de años atrás. Después de la boda, Dipper y Cipher habían decidido establecerse en Gravity Falls de forma permanente, aunque no sin antes ir a conocer el mundo tanto como el castaño deseara. La Cabaña del Misterio los recibió con los brazos abiertos y unos meses más adelante ambos habían logrado edificar una pequeña cabaña cerca del lago que vio nacer su amor.

La vida pasaba terriblemente alegre, un recordatorio de todas las bondades que el universo había deparado para ellos. En una de tantas noches de luna llena Axolotl regresó a los sueños de Cipher, con su silueta humana y cabellera rosada le saludó alegremente — Estoy tan contenta por ti, veo que has elegido sabiamente

— Absolutamente — como ya era costumbre, ambos yacían sentados en el escape mental mirando por la ventana de su mente, atravesando los recuerdos que alegraban y enorgullecían al rubio — Aunque sigue siendo tan irreal...

— Debes comenzar a asimilarlo, recuerda que todo es pasajero — Bill entendió perfectamente a lo que se refería, sin embargo, decidió dejar pasar el comentario y centrarse en la imagen de Dipper vestido de blanco llegando al altar — Aunque no vine para amargarte la noche, en realidad quería darte un regalo de bodas

El rubio la miró con cierta incredulidad y luego sonrió — No sabía que eras de esas

— Yo también puedo unirme a las tradiciones mundanas — alegó golpeándole el hombro, el contrario asintió esperando que hablara — Mi regalo será concederte un deseo, el que tú decidas, puedes decírmelo ahora o pedirlo en cuanto estés listo

— ¿Lo que sea?, eso suena peligroso, creo que olvidas con quien estás hablando — el de ojos ámbar la miró con cierta picardía y sonrió burlonamente

Axolotl se limitó a sonreír y regresar la mirada a los recuerdos del Cipher — Dudo que quieras arriesgar esto por un deseo estúpido — su acompañante rio ante tremenda verdad — Te daré un par de opciones — la mujer se levantó de su sitio y sopló en la palma de su mano elevando tres burbujas con ello, la primera se iluminó de inmediato — Te ofrezco una familia, lo que siempre has añorado y no lo sabías — la segunda se iluminó — Te ofrezco una vida mortal, lo necesario para que vivas todas tus estaciones al lado de Mason — la tercera finalmente imitó a sus iguales — Y te ofrezco una eternidad al lado de Mason, a pesar del tiempo, podrás encontrarlo una y otra vez, una vida tras otra hasta tu muerte