By Your Side [#LID SEGUNDA TEMPORADA]

༺†- Capítulo 42 -†༻

—¿No crees que tu madre estaba extraña en la cena? —le pregunto a Tom terminando de secar los platos.

—Si, la noté muy tensa. Quizá luego hable con ella, ¿Cómo te sientes?

—Bien, tengo un poco de sueño la verdad. No estoy durmiendo lo suficiente últimamente.

La melancolía me invade cada vez que recuerdo a Molly, aún no puedo creer que la asesinaron. Cada noche es una tortura para mi cabeza, no puedo evitar pensar que es mi culpa por haberla dejado sola, me arrepiento tanto de ir a ese maldito lago y dejarla sola, indefensa, atravesando una gran crisis personal por todo lo acontecido. Ni siquiera fui capaz de cuidar la pastelería, ese proyecto que nos tomó tanto tiempo realizar y que le dedicamos tanto amor, esfuerzo, tanta paciencia. Me siento mal, porque le fallé en todos los sentidos que pude hacerlo, no fui una buena compañera con ella y Molly siempre fue una excelente persona conmigo.

—Siento mucha culpa, Tom —rompo en llantos repentinamente.

Mi consciencia no está tranquila y las hormonas del embarazo no ayudan mucho que digamos, intento mostrarme fuerte con todos pero, ciertamente, cada vez que tengo un momento a solas me rompo en mil pedazos.

—Tranquila bebé, no es tu culpa...

—Si lo es, fui una estúpida todo este tiempo. Nada de esto hubiera pasado si no llamaba a Carter para empezar.

—Bebé, no debes seguir culpandote por haberlo llamado. Eras una joven desesperada por conseguir un futuro mejor, querías vivir tranquila y Carter era una buena opción para ese entonces, esto no es tu culpa.

—Tom, la mitad de las personas que amo están muertas. Tú y el bebé están en peligro, los chicos también, todo esto es mi maldita responsabilidad y no sé cómo lidiar con ello —me veo envuelta entre los brazos de mi novio, él sostiene mi cuerpo con fuerza mientras lloro desconsolada —. Esto es una maldita pesadilla.

—Todo estará bien, necesitas calmarte. No dejaré que Carter, ni tu madre se acerquen a nosotros. Sandie esta en prisión, piensa en eso.

—¿Debería alegrarme? Si el imbécil de Turner pudo escapar...

—Ella no podrá hacerlo, Simone se encarga de eso, confía.

—No lo sé, no puedo tranquilizarme. Mi cabeza no deja de sobrepensar las cosas. No encuentro calma en nada, Tom... me asfixio, siento que no tengo manera de canalizar todo lo que me sucede por dentro. No encuentro mi ancla.

—Ven, tengo una idea.

Tom entrelaza nuestros dedos y tomados de la mano salimos de la cocina, afuera la brisa primaveral se siente más pesada y húmeda, pareciera anunciar que pronto llegará el verano a la ciudad. Me dejo guiar por mi novio hasta su auto estacionado en frente de la casa, él abre la puerta para mi seguido de rodear el frente y ubicarse en el asiento del conductor.