Queen of Greed | Jenlisa

Capítulo 37

Lisa's POV

Jennie y yo pasamos todo el fin de semana en su apartamento. Comiendo, hablando, follando. Salimos a tomar el aire una vez, cuando su cascarrabias vecina aporreó la puerta y nos gritó por ser demasiado ruidosas y vulgares, pero aparte de eso, los días transcurrieron en una bruma feliz.

Volvíamos a estar juntas. No estábamos casadas de nuevo, pero habíamos dormido en la misma cama y me había invitado a su gran inauguración. Fue un paso de gigante comparado con nuestros anteriores pasos de bebé, y el subidón duró hasta bien entrado el lunes, cuando llegué a la oficina una hora más tarde de lo habitual porque nos había preparado el desayuno.

Avancé silbando por el pasillo, ignorando las miradas atónitas de mi equipo. Taeyeon me interceptó junto a los ascensores y me siguió hasta mi oficina, donde se cruzó de brazos y me miró como se mira a un tigre que se escapa.

ㅡ¿Se encuentra mal? ¿Necesita que llame a un médico?

ㅡEstoy bien. ㅡEncendí el ordenador y consulté las últimas cifrasㅡ. ¿Por qué? ¿Parezco enferma?

ㅡNo. Es que... sonríe mucho. ㅡSe golpeó el brazo con los dedosㅡ. Tal vez debería llamar al Doctor Stanley por si acaso. Tiene varias reuniones importantes con clientes...

ㅡTaeyeon. ㅡLa interrumpíㅡ. He dicho que estoy bien. Ahora, ¿tienes actualizaciones de trabajo para mí, o prefieres cambiar a una carrera médica?

Inmediatamente volvió al modo de jefa de personal.

ㅡHay rumores que esta semana se anunciará algo importante sobre un banco ㅡdijoㅡ. Aún no puedo confirmar nada, pero la gente está nerviosa. Sea lo que sea... se supone que será sísmico.

Había oído los mismos rumores. Wall Street estaba plagado de filtraciones y susurros. La mitad de las veces no significaban nada, pero de todos modos me mantuve alerta.

ㅡSigue investigando ㅡdijeㅡ. No quiero sorpresas.

ㅡEntendido.

El resto de la jornada transcurrió sin incidentes. Salí de la oficina a las cinco en punto, lo que me valió una nueva oleada de boquiabiertos y ojos saltones. Nadie en finanzas salía nunca puntual del trabajo, pero siempre había una primera vez para todo.

ㅡNo te quedes hasta muy tarde ㅡle dije a uno de los asociados junior al salirㅡ. Queda con tu novia para cenar. Disfruta de la noche.

Supuse que tenía novia. De lo contrario, la foto de escritorio de él con su brazo alrededor de una rubia sonriente era jodidamente extraña.

Me miró boquiabierto con una extraña mezcla de asombro, terror y reverencia.

ㅡS-sí, señora.

Pasé por mi floristería habitual de camino a Floria Designs y tomé una rosa dorada. No las vendían normalmente, pero hice que les mereciera la pena tener flores frescas a diario.

ㅡHola. ¿Cómo va todo? ㅡSaludé a Jennie con un beso.

ㅡBien. ㅡParecía un poco agotada, pero sonrió cuando le entregué la rosa y la nota. #21 de milㅡ. Estoy corriendo como un pollo sin cabeza, pero aparte de eso, estoy bien.

ㅡ¿Puedo ayudar en algo? ㅡLa gran inauguración de Floria Designs era este fin de semana. La tienda se veía muy bien, pero Jennie no se relajaría hasta que terminara. Era una perfeccionista cuando se trataba de eventos.

ㅡ¿Puedes clonarme o añadir más horas al día? ㅡSe apartó un mechón de cabello del ojo.

ㅡPuedo hacer que mi gente lo investigue, pero no puedo garantizarte una respuesta que te guste antes del sábado. ㅡLe puse una mano en la espalda y la dirigí hacia la salidaㅡ. Mientras tanto, vamos a comer.