Queen of Greed | Jenlisa

Capítulo 42

Jennie's POV

Nunca apareció.

La fiesta terminó pronto debido a una inminente tormenta que hizo que la gente se fuera a casa antes que llegara la lluvia, pero no me importó. La inauguración ya había sido un éxito rotundo y yo había agotado mi batería social de la noche.

Además, era difícil sonreír y fingir que no pasaba nada cuando mi corazón se rompía antes de curarse del todo.

ㅡQuizás tuvo un accidente ㅡdijo Suzyㅡ. Podría estar ahora mismo en el hospital, intentando arrancarse la vía para poder salir corriendo a verte. Estoy segura que no lo olvidó.

ㅡSuzy. ㅡRosé la fulminó con la miradaㅡ. No bromees con algo así.

ㅡ¿Qué? Cosas más raras han pasado. ㅡSuzy apretó el labio inferior entre los dientesㅡ. No me creo que Lisa se olvidara o decidiera no venir. No después de todo lo que hizo para recuperar a Jennie.

ㅡUstedes dos. ㅡJoohyun señaló a Jisoo y Bogum, que se congelaron al unísono. Nadie quería ser el blanco de su iraㅡ. ¿Dónde está su amiga?

ㅡNo ha respondido a nuestras llamadas. ㅡBogum se recuperó primero y me dedicó una sonrisa tranquilizadoraㅡ. Seguro que está de camino. Probablemente se retrasó.

ㅡO fue asaltada ㅡdijo Jisoo. Se encogió de hombros cuando Rosé le dirigió su mirada de muerteㅡ. Lo siento, mia cara, pero es una posibilidad.

ㅡChicos, está bien. ㅡEl agotamiento redujo mi vocabulario a lo estrictamente necesarioㅡ. No es su problema. Vayan a casa. Yo limpiaré.

ㅡAyudaré. ㅡJoohyun agarró una bolsa de basura.

ㅡNo ㅡdije con firmezaㅡ. Ya has hecho suficiente.

ㅡPero...

ㅡNo puedes...

A pesar de sus protestas, obligué a mis amigas a salir por la puerta minutos después. Agradecí su preocupación, pero quería estar sola.

Me dediqué a tirar la basura y a guardar las sobras en la nevera. Era como ver a alguien disfrazado de mí; se parecía a mí y se movía como yo, pero no se sentía como yo. Era una extraña que representaba la vida de mis sueños.

Me detuve ante el collage que me había costado semanas crear. Ocupaba toda la pared derecha. Los pétalos brillantes y vibrantes se desvanecían poco a poco hasta convertirse en marrones apagados que dominaban el centro de la pieza antes que una pizca de color volviera a colarse en el lienzo.

Vida, muerte, renacimiento. No era sutil, pero no quería que lo fuera. Lo quería como recordatorio de lo que había dejado y en lo que no quería volver a caer.

ㅡJen.

La voz a mis espaldas me puso los pelos de punta. Debería haber cerrado la puerta, pero estaba demasiado distraída con la presencia de Lisa. Mis instintos de autoconservación salieron por la ventana en cuanto ella entró en escena.

ㅡLlegas tarde. ㅡNo me giré, temiendo que si lo hacía, empezaría a llorar y no pararía nunca.

ㅡCariño…

ㅡNo, espera. Eso está mal. ㅡLa desilusión astilló el ritmo de mis palabrasㅡ. No llegas tarde; nunca apareciste. La fiesta ha terminado, Lisa. No necesitas estar aquí.

ㅡSí, lo necesito. ㅡSu presencia rozó mi espalda, cargada de pesar, y cerré los ojos contra una lágrima cuando su mano tocó suavemente mi brazo.

ㅡPorque estás aquí.

ㅡEntonces, ¿dónde estabas antes? ¿Estabas trabajando? Silencio.

ㅡSí o no, Lisa.