Capitulo 27: Una revelación inesperada

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Pasaron algunos días desde aquel extraño sueño, y aunque intentaba no pensar mucho en ello, la voz de ese tal Thomas seguía resonando en mi cabeza. Hoy, el Área parecía tranquila, pero sabía que algo estaba por cambiar.

Mientras caminaba cerca de los cultivos, vi a Chuck corriendo hacia mí con una sonrisa enorme. "¡Novata! ¡Novata!" gritaba con entusiasmo, agitando los brazos como si hubiera descubierto algo grandioso.

“¿Qué pasa, Chuck?” le pregunté, riendo ante su entusiasmo.

“¡Ven conmigo! Newt y Minho están discutiendo algo importante, creo que tiene que ver contigo,” respondió, jalándome del brazo.

Lo seguí hasta donde estaban reunidos Newt, Minho y otros chicos, todos con una expresión seria. Gally estaba ahí también, con los brazos cruzados y esa mirada fría que me hacía sentir incómoda. Pero esta vez no me importaba; quería saber de qué se trataba todo ese alboroto.

“¿Qué está pasando?” pregunté, al llegar al grupo. Todos dejaron de hablar y me miraron.

Minho fue el primero en hablar. “Bien, novata, hemos estado discutiendo... sobre ti.”

“¿Sobre mí?” fruncí el ceño, confundida.

Newt se acercó, rascándose la cabeza, como si tratara de encontrar las palabras adecuadas. “Sí, verás... después de todo lo que pasó, creemos que tal vez tú tienes más que ver con este lugar de lo que piensas.”

“¿Qué quieres decir con eso?” pregunté, nerviosa.

“Ese nombre que mencionaste, Thomas,” dijo Minho. “No es una coincidencia. Hay algo raro en todo esto.”

“No lo entiendo,” murmuré, sintiéndome abrumada. “Solo fue un sueño...”

“¿Estás segura?” intervino Gally, con su tono sarcástico habitual. “Porque desde que llegaste, todo ha sido un desastre. Tal vez estás más conectada con este lugar de lo que creemos.”

“Cállate, Gally,” dijo Minho, lanzándole una mirada de advertencia. “Esto no es su culpa.”

“No estoy diciendo que lo sea,” replicó Gally, “pero no podemos ignorar que cosas raras han estado pasando desde que llegó. Y ahora, ese nombre…”

“Thomas,” repetí en voz baja, mientras trataba de recordar más detalles. Pero nada venía a mi mente.

Newt puso una mano en mi hombro, ofreciéndome algo de consuelo. “Mira, no queremos asustarte, pero creemos que es importante que estés al tanto de todo esto. Algo grande está ocurriendo, y puede que tú seas la clave.”

“Pero... ¿qué puedo hacer yo?” pregunté, sintiéndome perdida.

Minho suspiró, mirando a los demás antes de responder. “Eso es lo que tenemos que descubrir.”

Gally bufó, claramente molesto. “Esto es una pérdida de tiempo. No es más que una novata que no tiene idea de lo que está pasando.”

“¡Ya basta, Gally!” grité, dándole un empujón. Estaba cansada de sus comentarios hirientes.

Por primera vez, Gally no respondió con agresividad. Me miró con una mezcla de sorpresa y algo que parecía... ¿duda? Antes de que pudiera decir algo, simplemente se dio la vuelta y se fue, dejándonos a todos en un incómodo silencio.

Chuck, siempre el optimista, trató de aliviar la tensión. “Bueno, al menos no te empujó esta vez,” dijo con una sonrisa.

Minho rió ligeramente, y hasta Newt sonrió un poco. Pero la sensación de que algo estaba a punto de cambiar seguía ahí, en el aire.

“Estaremos contigo, pase lo que pase,” dijo Newt finalmente, mirándome a los ojos.

“Gracias,” respondí, aunque no podía evitar sentir que algo grande se avecinaba, algo que ninguno de nosotros estaba preparado para enfrentar.

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