Dentro del área

Capitulo 41: Conexiones

El ambiente se sentía más tranquilo, aunque la tensión todavía colgaba en el aire como un recuerdo persistente. Después de que Chuck se fue corriendo, quedé sola por un momento, mirando hacia las lanzas apoyadas contra la pared. No podía sacarme de la cabeza el hecho de que Gally había estado dispuesto a entrar al Laberinto para buscarme.

Thomas rompió el silencio al acercarse, con su habitual mirada curiosa. "¿Estás bien?" preguntó, cruzándose de brazos.

"Sí... solo que aún no termino de asimilar todo lo que pasó," respondí mientras me pasaba una mano por el cabello.

Thomas asintió, pero no dijo más. En cambio, miró en dirección a Gally, que estaba ocupado ajustando unas herramientas, aunque su postura rígida delataba que sabía que hablábamos de él.

"Te cubro si quieres hablar con él," dijo Thomas en voz baja, con una leve sonrisa de complicidad.

Lo miré, sorprendida. "¿Hablar con Gally? ¿Para qué?"

Thomas se encogió de hombros. "No sé... parece que hay cosas que ambos necesitan aclarar."

Negué con la cabeza, pero en el fondo sabía que tenía razón. Había algo que necesitaba decirle, algo que quería entender.

Respiré hondo y me acerqué a Gally, aunque con cada paso sentía cómo la tensión crecía en mi pecho. Él no levantó la mirada hasta que estuve lo suficientemente cerca.

"¿Necesitas algo?" preguntó, manteniendo su tono frío, aunque su voz tenía un leve temblor que me hizo dudar de su actitud.

"Quería agradecerte... por lo que hiciste," dije con sinceridad, mirándolo directamente.

"¿Por lo que hice?" se burló, soltando una risa seca. "No hice nada, solo afilé un par de lanzas."

"Eso no es cierto, y lo sabes," le respondí, intentando mantener mi firmeza. "Si realmente pensabas entrar al Laberinto, significa que te importaba lo suficiente como para arriesgarte."

Por un momento, Gally pareció debatirse internamente. Finalmente, dejó caer la herramienta que tenía en las manos y me miró, su expresión más suave de lo que había esperado.

"Todo esto... este lugar, estas reglas," comenzó, señalando alrededor, "no estoy aquí para hacer amigos ni para preocuparme por nadie. Pero cuando desapareciste, algo en mí no pudo quedarse quieto."

Sus palabras me tomaron por sorpresa. "¿Y eso qué significa?"

Significaba que había algo más detrás de su dureza, algo que apenas podía entender. Pero antes de que pudiera responderme, la voz de Newt interrumpió el momento.

"¡Vamos, chicos! Se está haciendo tarde. Necesitamos reunirnos en la fogata."

Gally dio un paso atrás, cerrando nuevamente la barrera emocional que parecía haberse roto por un instante. "Ve con los demás. No es seguro quedarse sola en este lugar."

"¿Y tú?" pregunté.

"Yo estaré bien," respondió, dándome la espalda mientras retomaba su trabajo.

Me quedé ahí, mirándolo por unos segundos antes de regresar con los demás. Aunque las palabras no fueron muchas, sentí que algo había cambiado entre nosotros, algo que no sabía si me aterraba o me intrigaba más.