El ambiente en el paddock sigue vibrando con la energía del día, y mientras caminamos hacia el estacionamiento, no puedo evitar pensar en lo que ha sido una jornada repleta de emociones. La risa de Franco y la tranquilidad de Max me acompañan, pero hay algo más que comienza a surgir en mi mente.Mientras nos alejamos de los boxes, me encuentro mirando hacia el garaje de McLaren. La pintura naranja brillante de su monoplaza es inconfundible, y algo dentro de mí se siente atraído hacia el piloto que lo maneja. Lando Norris. He escuchado rumores sobre su talento y su estilo desenfadado, pero nunca lo había visto en acción tan de cerca.
Franco se da cuenta de mi distracción.
—¿Te gusta el color naranja? —bromea, siguiendo mi mirada.
—No, es solo que... —me detengo un momento, buscando las palabras adecuadas—. He escuchado que Lando es bastante talentoso, y parece tener una personalidad interesante.
Max arquea una ceja, pero en lugar de burlarse, se interesa genuinamente.
—Lando es un gran piloto, sin duda. Pero ten cuidado, Jenny. Este mundo está lleno de encantos, y él sabe cómo usarlos.
Franco sonríe, como si conociera un secreto.
—Sí, es el tipo de chico que puede hacerte reír en medio de la presión. Pero no te dejes engañar, es un competidor feroz.
Me sorprende la defensa que ambos hacen de Lando, aunque no puedo evitar sentir curiosidad. Sigo observando el garaje, donde Lando intercambia bromas con su equipo. Su risa resuena a través de la atmósfera, y eso me hace sentir un poco más intrigada.
Esa noche, después de una cena que celebra los logros del día, me encuentro en un rincón del restaurante revisando mis fotos de la práctica. La luz suave del lugar crea un ambiente relajado, y mientras paso las imágenes, una en particular me atrapa: es una captura de Franco con una expresión de pura alegría, justo después de mejorar su tiempo.
—¿Puedo ver? —me pregunta una voz detrás de mí.
Al girar, me encuentro con Lando, quien se ha acercado con su típica sonrisa amplia.
—Oh, claro, —respondo, sintiendo un ligero rubor en mis mejillas. —Acabo de capturar algunos momentos de la práctica.
Lando se asoma a la pantalla y empieza a reírse de las caras de Franco en algunas fotos.
—¡Esa es genial! Parece que acaba de ganarse el premio de "tonto del año"! —dice entre risas.
Su energía es contagiosa, y no puedo evitar sonreír mientras él sigue pasando las imágenes.
—¿Tú también corres? —le pregunto, intentando cambiar el tema un poco.
—Sí, aunque a veces siento que mis expresiones podrían distraerme más que ayudarme en la pista —responde con una sonrisa pícara.
La conversación fluye de manera natural, y me doy cuenta de que, a pesar de estar en el corazón de un deporte tan competitivo, Lando tiene un encanto que hace que todo parezca más ligero. Compartimos un par de anécdotas, y mientras él habla, me doy cuenta de lo mucho que admiro su forma de ver las cosas. Su perspectiva sobre la presión de las carreras y la importancia de disfrutar el momento resuena en mí.
—Es genial que estés aquí, —dice Lando, volviendo a centrar su mirada en mí—. Siempre se necesita alguien que capture esos momentos.
Mi corazón da un vuelco al escuchar sus palabras. A veces, me olvido de lo que significa mi trabajo en medio de la locura del circuito. Sin embargo, la conexión que empiezo a sentir con Lando me hace querer capturar cada instante, no solo por mi trabajo, sino por la experiencia que representa.
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Sassy Pilot x Lando Norris +18❤️🔥
FanfictionÉl es un piloto que enciende pasiones dentro y fuera de la pista. Con una sonrisa cautivadora y una mirada que desarma, sabe el efecto que tiene en los demás... y lo disfruta. Pero cuando te conoce, algo cambia. Tú no eres como el resto; no caes en...