Capítulo 1

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Aquí estaba yo poniéndome mi nuevo vestido, es azul turquesa, corte circular, de manga larga, cuello cuadrado y el largo un poco más arriba de la rodilla. Mi papá me lo compró como regalo de graduación de la preparatoria, una baratija comparado con los miles que gana no somos lo que se dice millonarios, ni ricos, pero se puede decir que no tenemos muchos problemas cuando se trata de dinero.

Mi papá había comenzado como carpintero de una pequeña fábrica pero cuando la fábrica tomó más prestigio lo ascendieron y ahora solo se encarga de revisar que todo funcione como debe ser.

Me puse mis zapatos de tacón y comencé a peinarme, pronto llegaría Tyler y no me gusta hacerlo esperar.

Llevábamos saliendo casi seis meses, en enero cuando regresábamos de vacaciones de invierno, me invitó a salir, recuerdo lo guapo que me pareció cuando de la nada se me acercó y me preguntó si me gustaría ir al cine con él. Y fue tan tierno cuando se fue corriendo con sus amigos a decirles que si había aceptado.

No podía creer que un chico tan sexy como Tyler se fijara en mí, no digo que yo sea fea pero en comparación con esos ojos azules, su cabello castaño claro, lacio, su sonrisa y esos fuertes brazos yo no era nada.

Bajé las escaleras y me puse a jugar con mi celular mientras llegaba Tyler.

- ¿Vas a irte con Tyler? -preguntó mi mamá.

-Si, dijo que me tenía una sorpresa preparada -respondí sonriente.

-Qué lindo -dijo y en eso sonó el timbre.

-Hablando del rey de roma -dije mientras guardaba mi celular y me levantaba -ya me voy, nos vemos al rato.

-No llegues tan tarde, ten cuidado.

-Si mamá.

Salí de mi casa y cerré la puerta.

-Hola -dijo Tyler mientras se acercaba a mí con una sonrisa en el rostro, uno de sus brazos se posó en mi cadera y el otro en mi espalda, me besó, su boca hizo que la mía se abriera, cuando menos lo pensé su lengua estaba dentro de mi boca, su brazo empezó a bajar hasta llegar a mi trasero. Me tenía estampada contra la puerta de mi casa, me alejé de él.

-Oye tranquilo -dije contra sus labios y entonces empezó a besarme más dulcemente.

-Te extrañé -dijo alejándose y tomándome de la mano.

-La última vez que nos vimos fue ayer en la tarde -dije siguiéndolo hacia su auto.

-Son más de doce horas -dijo mientras me abría la puerta del auto.

- ¿A dónde vamos? -pregunté cuando él se sentó en el asiento del piloto.

-A un lugar que te sorprenderá.

Cuando el auto se detuvo estábamos parados frente a un parque, Tyler bajó del auto y me abrió la puerta.

-Mi princesa, ven aquí -dijo dándome la mano y sacándome del auto.

Me guió hacia el parque y nos sentamos en una banca, estaba oscuro y no había ni un alma en el parque. Tyler me sentó en sus piernas y empezó a besarme, enrosque mis brazos en su cuello y lo acerqué más a mí, él comenzó a meter la mano bajo la falda de mi vestido, me alejé de él y lo empujé bajándome de su regazo.

- ¡Tyler! Compórtate o me iré, ya te dije que no soy así, no soy de esas chicas que se meten con cualquiera solo porque les habla bonito -dije enojada - ¡y lo peor del caso ni siquiera me llevas a un lugar decente! Piensas hacerlo aquí en el parque.

- ¡No, no! Lo siento, lo siento solo...me dejé llevar, lo siento no te vayas aún tengo que darte tú sorpresa.

-Tyler no... yo... llévame a casa -dije caminando hacia el auto.

Mi secuestroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora