Mi Pesadilla Más Oscura - Tom Kaulitz.

No tengo miedo.

CAPíTULO 44

Pov de Tom:

Vi a Katy subir las escaleras con una
sonrisa de lado. Sus pasos resonaban
en la cocina mientras ella se alejaba,
dejándome solo con mi hermano. Me
pregunté si estaba haciendo lo correcto al confrontar a Bill sobre las drogas, yo no podía simplemente ignorar esta situación.

Di un ligero suspiro, acercándome a Bill que estaba totalmente inestable. Lo miré con preocupación, mientras sostenía la droga en su mano. Traté de encontrar las palabras adecuadas para romper el silencio tenso, sabía que Bill estaba luchando con la pérdida reciente.

--- Si intentas hacer eso de nuevo, yo mismo te mataré. --- Dije con voz seria.

--- Tengo que lidiar con esta mierda
de alguna manera. --- Bill dijo, abriendo el paquete y recogiendo uno comprimido.

--- ¡Mierda! Ten cuidado con eso. --- Digo con una mirada de preocupación, ver a mi hermano de esa manera estaba acabando conmigo.

Pero desafortunadamente fue así, siempre resolvemos los problemas de esa manera. Bill siempre recurriría a las drogas en momentos de dolor insoportable, fue un escape temporal de la realidad para él. Bill miró fijamente al comprimido en la mano, una mezcla de ansiedad y desesperación estaba reflejada en sus ojos. Con un suspiro pesado, levantó su copa y sin dudarlo, se tragó las pastillas.

--- ¡Mierda! --- Grité.

Después de un momento de silencio tenso, bajó el vaso y cerró sus ojos, dejándose hundir en la niebla estupefaciente que las drogas y el alcohol proporcionaron.

--- ¡Mierda! necesitas experimentar
esto. --- Bill dijo, dejando caer una
respiración pesada a continuación.

Ésa era una droga fuerte de efecto rápido, ya parecía haber golpeado. Me di cuenta de que necesitaba estar sobrio, yo tenía que cuidar de Katy. Ella estaba sufriendo por la pérdida de su mejor amiga y yo necesitaba ser su apoyo en ese momento.

--- No voy a usar esa mierda, tengo que cuidar de Katy. --- Empecé a decir, con una voz baja. --- Y aparentemente, de ti también. --- Dije, poniendo una mano en su hombro.

--- Siempre lo usamos juntos, ¿te echas para atrás ahora? --- Bill dijo dando vueltas sus ojos, extendiendo su mano con la droga.

Mientras ponía la bebida en un vaso, me encontré perdido en mis propios
pensamientos. Miré a la droga, pero mi mente estaba lejos de allí. Estaba pensando en Katy, en cómo estaba cambiando sutilmente mi esencia.

Una sensación de incomodidad y enojo me invadía al contemplar la idea de haberme enamorado de verdad por ella. Sabía que no quería eso, no puedo ser vulnerable de esta
forma.

--- ¡A LA MIERDA! --- Grité, agarrando la droga de la mano de Bill.

Mi deseo era huir de estos pensamientos que me atormentaban
todos los días. Cogí algunos comprimidos, tragándolos a continuación con la dosis de bigotes. Un ligero sabor metálico se mezcló con el amargo sabor del alcohol. El líquido ardía en mi garganta mientras tragaba.

--- ¡Mierda! ¿CUANTOS HAS TOMADO? --- Bill gritó, riéndose.

Di una sonrisa de lado, bajando mi
cabeza a continuación. Ya estaba en
efecto, una ola de calor se se extendió por mi cuerpo rápidamente, junto con una sensación de entumecimiento que me involucraba. Mis pensamientos comenzaron a disiparse lentamente, perdiendo la nitidez que antes los caracterizaba. Sin embargo, por muy tentadora qué sea la sensación de escapismo, una voz en el
fondo de mi mente susurraba que
necesitaba cuidar de Katy.

Pov Katy:

Fui hacia las escaleras lentamente, subiendo y avanzando hacia el cuarto. Rápidamente entré y cerré la puerta, tomando una toalla y entrando hacia la suite a continuación. No pude evitar que más lágrimas caígan sobre mi cara, yo estaba temiendo lo que iba a pasar. Entré en la suite y cerré la
puerta, sacando mi ropa y entrando en calzones a continuación.

Mientras que el agua caliente de la ducha caía sobre mi cuerpo, traté de ahogarme en los pensamientos dolorosos que tengo desde la pérdida de mi mejor amiga. Mi mente vagaba por el extraño comportamiento de Tom antes, se veía diferente. Aunque me siento enojada con él, eso me dejó un poco intrigada.

Terminé mi baño y apagué la ducha,
envolviéndome en la toalla y saliendo de la suite. Fui al armario donde estaba la ropa que Tom tenía comprado para mí, eligiendo una falda y una blusa caliente, porque todavía hacía un poco de frío.

Terminé de vestirme y sentí un aprieto en el pecho, al pensar en lo que me esperaba al bajar las escaleras. O el miedo se insinuaba en mi mente, susurrando dudas sobre cómo hacer frente con la delicada
situación que me lo encontraba.

Sabía que tenía que enfrentar la realidad, pero el simple pensamiento de que Bill probablemente estaría drogado era suficiente para hacer que  mi estómago se revuelva de aprensión. Abrí la puerta de la habitación lentamente, cuando de repente escuché las risas de los dos.

Comenzó un sentimiento de ira a dominarme, al pensar que después de
todo lo que había sucedido estaban
simplemente riendo de esa manera.
Cerré mis puños enojada, comenzando a bajar las escaleras en
siguiente. De repente me detuve en
el camino asustada, al parecer los dos estaban totalmente drogados.

--- ¡A LA MIERDA TODO ESTO! --- Bill gritó, girando su vaso de bebida en su boca y rompiéndolo en el suelo en siguiente.

Tom tenía la cabeza gacha, pero se
estaba riendo de todo eso. Parecía
extraño, como si no estaba bien. Me
quedé paralizada, parada en medio de la escalera asustada con lo que estaba viendo.

Empecé a dar ligeros pasos hacia atrás, quiero alejarme de todo eso. Cuando de repente me di cuenta de que habían notado mi presencia. Tom rápidamente comenzó a venir en mi dirección, lo que hizo mi corazón disparar.

--- Hola gatita, te tomaste tu tiempo. --- Tom dijo, acercándose a mí.

Por un momento tenso, miré en sus ojos, viendo que sus pupilas estaban totalmente dilatadas. Yo no pude decir nada, me quedé sin reacción. Me sentí incómoda vulnerable ante la presencia de él en ese estado. No sabía cómo reaccionar, solo senti el peso abrumador de la situación.

Tom dio una sonrisa de lado,
sosteniendo mi brazo y llevándome a la cocina a continuación. Él tenía una
expresión vacía en su rostro, dando
pasos lentos y torpes. Bill me miró venir a la cocina con una expresión incómoda, mirándome de arriba
abajo. Él pronto dio una sonrisa de lado y cogió otro vaso de bebida y se fue a la habitación.

--- ¿Tienes miedo Katy? --- Tom preguntó mientras me llevaba en dirección a la mesa.

--- No tengo miedo. ---Respondí, tratando de contener mi ira y no hacer ver mi miedo.

--- Ahora beberás conmigo. --- Tom dijo, mezclando algunas bebidas en un trago. --- Eso te hará más tranquila. --- Dijo a continuación, tomando el vaso en mi dirección.

Mi cuerpo comenzó a temblar cuando Tom extendió el vaso de bebida, dando una sonrisa maliciosa a continuación. Yo permanecí inmóvil, perdida en mis propios pensamientos.
No podía entender cómo podían entregarse tan fácilmente a las drogas y alcohol, especialmente en un momento como este.

No sabía por qué Tom se drogo
también, no parecía estar muy triste.
Rechacé el vaso con un guiño ligero de cabeza, me miró  con una mirada de ira y desaprobación. Tom rápidamente sostuvo detrás de mi
cabeza y tiró de mi pelo con fuerza,
haciéndome soltar un gemido de dolor. El mismo puso el vaso en mi boca, derramando por mi garganta después.

--- ¡VAS A HACER LO QUE YO DIGO,
JODER! --- Tom gritó, mientras
derramaba la bebida violentamente por mi garganta.

Sentí un calor extendiéndose por
mi garganta mientras bebi la bebida, acompañado por una sensación de ardor que era incómodo. Mis ojos comenzaron a llorar cuando traté de alejarme de Tom, pero él rápidamente me sostuvo y puso su mano en mi boca, forzándome a tragar todo mientras se reía.