WILLOWEscuchar a mi mamá hablando con la madre de Morgan ha sido como un balde de agua fría, apenas escuche que se iría sentí que mi corazón comenzó a latir como loco. No puede irse tan pronto, me niego a que se vaya tan pronto, aún hay tanto que nos faltaba por hacer en las semanas que nos quedaban.
Me aferro al cuerpo desnudo de Morgan y ella acaricia mi espalda con sus manos. Llevamos un largo rato en silencio, nos venimos a la cabaña de mi mamá para estar más tranquila, aún no me explico como mi abuela no ha notado que me robé las llaves, cuando se entere me mata, eso es seguro.
—Son casi las tres —susurra Morgan —y debemos ir al instituto.
—Mi madre va a matarme —respondo levantando mi rostro para ver sus hermosos ojos azules.
—Bueno, a mi quizás me envíen mañana mismos —sonríe y yo siento que su broma me estruja el pecho —ven aquí —me abraza fuerte y luego nos cubre con una sabana.
—Le dire a mi madre que me quedaré con mi abuela y pasaremos el día entero aquí —dejo un beso en su mejilla.
—Lo que quiera mi princesita.
—Deja de llamarme así —aprieto su mejilla y se queja —seguiré llamándote brujita si no paras.
—Haz lo que quieras.
—¿Qué te ocurre? —me acuesto a su lado y ella se da la vuelta para verme de frente —no me estás llevando la contra, esto no está bien.
—Solo quiero complacerte —muerde su labio y ruedo los ojos.
—Eres peor que mis madres —ella se ríe y se inclina para besarme.
—Tu deberías ser más cariñosa, como hace un momento en el que me pedías que no me fuera porque me quieres a tu lado —arrugo mi nariz y me doy la vuelta.
—Fue un momento de debilidad, nada importante.
—A mi me importa —dice abrazándome por la espalda y besa mi hombro.
—Ya duérmete, Morgan.
Apenas dormimos un poco, yo tengo que volver a casa antes de que mi madre despierte, pero claro, nada podía salir tan bien como esperaba, apenas entro por la puerta trasera, mi mami está de brazos cruzados observándome desde la cocina.
—Ve a bañarte —me exige y no digo nada, solo me apresuro a subir a mi habitación.
Estoy agotada y solo quisiera domir, pero sé no puedo faltar, es mi última semana en el instituto y también la última que veré a Morgan. Eso me anima un poco y me apresuro a prepararme para ir a al instituto. Una vez que estoy lista, bajo a la cocina y los mamis parecen estar de buen humor, excepto Skylar cuando me ve, sé que supo disimularlo muy bien ante mi mamá, pero no está para nada contenta conmigo.
—Yo te llevaré —dice mi mami y asiento.
Termino mi desayuno y subo al auto con mi hermano en la parte trasera, Gael se coloca sus audífonos y mi mami avanza en silencio por un rato, luego se asegura que mi hermano no esté escuchando y me mira.
—¿Quién es? —me pregunta y bajo la vista.
—Se irá pronto, no volveré a verla, te lo prometo.
—No se trata de eso, pero estás incumpliendo nuestras reglas, Willow.
—Ya no lo haré más —aparto mi vista hacia la ventana —de verdad se irá.
—Willow, solo ten cuidado, no quiero que nada malo te pase, el camino es peligroso a esa hora —suspira.
—Me quedaré en casa de la abuela —le digo y toma mi mano dándome un suave apretón.

ESTÁS LEYENDO
Amor Letal
RomanceMorgan Young ha decidido seguir los pasos de su madre, la organización tendrá una nueva jefa que tendrá que enfrentarse a uno de sus más grandes enemigos, mientras se debate entre su lealtad por la organización y el amor por Willow McAlister, la arq...