¿Venganza o Amor?

¿Loca?

— ¿Qué paso con Tiffany?— Fue lo primero que dijo Ashley.

— ¿Qué paso de qué?— dije cambiándome.

— La abofeteaste Jadeline, ¿Por qué?— pregunto algo molesta.

— Oh eso— Casi Sonreí al recordar.

— Si eso, ¿Por qué lo hiciste?— Ashley tenía las cejas en alto y los brazos cruzados frente a su pecho.

— Porque tu amiguita esta de resbalosa con mi novio— Hable enfatizando de más las últimas dos palabras.

— ¿Con Carlos?— Mi hermana sonaba sorprendida y eso me hacia odiar más a Tiffany, mi hermana confiaba en ella y me molestaba.

— Si Ash, con Carlos y si no se aleja de él le ira peor—

Ashley no contesto nada y salió de mi cuarto, después de unos 15 minutos alguien toco, Ashley y Tiffany no estaban fui a abrir y era Carlos.

—Hola— lo bese sonriendo y haciendome a un lado de la puerta— Pasa— Entro, y nos sentamos en la sala.

— ¿Qué hacías?—

— Recostada ¿y tu amor?—

— Pensando en ti hermosa— le sonreí— Y en Tiffany—

Sentí el nudo en mi garganta, ¿Desde cuando era tan malditamente celosa?

— ¿Tiffany?— pregunte algo desconcertada— ¿Qué pensabas sobre ella Carlos, en su hermoso cuerpo?— dije recordando las palabras de James, y si, tal vez un poco celosa.

— El tuyo es mejor amor— dijo abrasándome y burlandose de mi reacción — Y no me refiero a eso, sino a que es muy rara conmigo, se la pasa… coqueteándome—

— Todas lo hacen Carlos— Rodé los ojos.

Estar con cualquiera de estos chicos era un dolor de cabeza cuando salias y la mitad de las chicas se giraban a mirarlos como si se tratará de una exposición de algo.

— No te pongas así, solo digo que comienza a ser incomodo—

— Solo ignórala y ya— Le sugeri.

— No puedo, hace rato fue a mi habitación y comenzó a decir…— lo interrumpí.

— Espera, ¿Cómo que fue a tu habitación? ¿La dejaste entrar?—
— Claro que lo hice, no la dejaría afuera— Me dijo como si fuera lo más obvio del mundo. Y tal vez lo era, pero eso no impidió para nada que me enojara.

— Claro, tu tan lindo como siempre Carlos ¿y qué te dijo la estúpida esa?— dije molesta.

— ¿Sabes qué?, olvídalo, no debí decirte nada… me voy; tranquilízate Jadeline — Se paró y camino a la puerta.

— No Carlos, dime qué diablos te dijo la maldita esa— dije deteniéndolo.

— Dijo que le gusto, eso es todo Jadeline — dijo desesperado.

— ¿Eso es todo? Qué bien Carlos deberías andar con la loca esa tiene buen cuerpo ¿No?—

— En este momento, tú también pareces una loca—

Me desconserto y achine los ojos mirándolo.

— ¿Loca?

— No, perdón— Dijo haciendo una mueca.

Yo solo no paraba de pensar en ella con su micro vestido sentada a su lado haciendo lo que sea para que la mirará, yo conocía a Tiffany y aunque no sabia porque le gustaba tanto meterse conmigo siempre lo conseguía porque al final yo se lo permitía pero esta vez no quería que fuera así, pero Carlos estaba ahí diciendome que aún después de la bofetada que le di ella fue a meterse a su habitación y le dijo que le gustaba. Estaba molesta pero ya no sabia si ese enojo era con ella o con Carlos.

—No ya lárgate, vete con ella o con la camarera también es linda, y adivina que… le gustas— dije y le cerré la puerta en la cara.

Me metí a la cama sólo para dejar de pensar estupideces y me quede dormida.