Capítulo 31

12.6K 558 30
                                    

Noto como J.D. me lleva lejos de Toni mientras Abi me pide perdón por dejarme sola. Sé que no es su culpa y debería decírselo pero en este mismo instante sólo quiero estar abrazada a J.D. y olvidar lo de Toni. Noto como me hace sentarme en un coche junto a Abi en el asiento trasero mientras escucha a J.D. y Alex hablar, aunque sus palabras no tienen sentido para mí, seguramente porque mi cabeza no está funcionando bien.
-Sí Alex y no empieces con las putas charlas de hermano mayor- dice enfadado J.D. Cierro los ojos y dejo caer mi cabeza sobre el hombro de Abi, cayendo en un sueño esta vez vacío.

Me despierto agotada y las imágenes del rostro de Toni bañado en sangre con su mirada llena de ira me atormentan haciendo que mi cuerpo sea cubierto por una capa de sudor frío.
-Buenos días pequeña- me dice J.D. El susto es tan grande que provoca que mis latidos parezcan taquicardias. Me doy media vuelta para verlo en mi cama sentado aún con la ropa de la noche anterior.
-¿Qué haces aquí J.D.? Mi hermano podría verte- le digo preocupada. Escucho como de su apetecible boca sale una suave risa y me preocupo aún más.
-Llevo toda la noche cuidado de ti, no sabía como reaccionarías con lo de anoche, y por lo de tu hermano ya no hay preocupación, ya lo sabe- me dice mientras sonríe aunque su sonrisa no llega a sus ojos, estos están apagados.
-J.D. yo...- empiezo a decir pero él me corta.
-Te prometí que te cuidaría y no he cumplido, si no llegas a reaccionar así dios sabe que podría haberte hecho, pequeña- empieza a decir él. Su mirada se oscurece y se torna más triste, sé por donde quiere ir y no lo dejaré ir por ahí.
-J.D. a sido un simple descuido ¿vale?- le contrario. Veo como niega con su cabeza pero le interrumpo en el momento justo en que va a volver a hablar- es una rata J.D. es normal que cueste saber cual será su proximo movimiento y tú lo has hecho bien, el error fue mío por descuidarme y ya está. No quiero que te sientas culpable- le digo. Antes de que responda le beso y damos por finalizada la conversación para besarnos como tanto nos gusta.
-Entonces es verdad...- escucho a Alex y enseguida nos separamos- estais juntos.
-Alex yo...
-No pasa nada hermanita- me responde tranquilo. Lo miro a los ojos y no veo enfado ni nada por el estilo por lo que me tranquilizo- sólo... J.D. cuídala si no te corto lo que te cuelga- veo como J.D. levanta una ceja y comienzo a reir a pleno pulmón.

A pesar de que me siento fenomenal, J.D. y mi hermano se empeñan en no separarse ni de mí ni de Abi por lo que proponemos alquilar algunas pelis y verlas los cuatro juntos mientras comemos pizza y palomitas, todo un planazo. La primera película que vemos es una comedia; dos policias rebeldes de Will Smith y las risas son tantas que termina doliéndome la barriga y la mandíbula. Cuando la película termina, J.D. llama a un italiano y pide una pizza xxl. Nos entretenemos charlando y fumando tabaco hasta que el pizzero llega. Abi paga la pizza y enseguida comenzamos a devorarla.
La noche transcurre tranquila, con risas y películas de acción hasta que nos damos cuenta de que son las tres y cuarto de la noche y decidimos ir a dormir. A pesar de creer que mi hermano se tomaría a peor nuestra relación, Alex se lo toma bastante bien. J.D. es su amigo y lo conoce y creo que es por eso que respeta que estemos comenzando algo entre nosotros, tanto que ni siquiera pone pega cuando J.D. me toma por la cintura para desviar mis pasos de mi habitación y llevarme entre besos hasta la suya. Lo que queda de noche se basa en besos, cariño y sexo. Tras toda la acción, J.D. me abraza y se acurruca firmemente a mi espalda.
-Buenas noches pequeña- me dice. Sonrío y le contesto, acto seguido me dejo llevar por el sueño.
La mañana llega rápidamente y con ella los besos de J.D. para despertarme. Sonrío aún con los ojos cerrados y es cuando siento sobre mis labios los de él, en un beso lleno de ternura.
-Quiero que esto valla bien pequeña- me dice a escasos milímetros de mi boca. Algo dentro de mí explota, llenándome de una agradable sensación de paz. Sé que quedará bastante para que me diga te quiero o algo por el estilo pero al menos está dispuesto a intentarlo y a que salga bien y eso ya, es algo.

Hoy por fin es lunes puedo comenzar a trabajar, sin quitarme a Héctor de encima pero menos es nada, así al menos tendré con quien hablar en los descansos si me aburro. J.D. me ha dado carta blanca para estar aerografiando en el taller de pintura tras una normal pelea porque no quería que viniese al taller a trabajar. Al final este es el resultado; Héctor con un mono protector y la mascara para entrar al taller de pintura. Tengo aquí el coche de Abi que, gracias a mi hermano y sus métodos persuasivos, a tomado el coche de Alex para ir a la tienda de repuestos, dejándo su coche en mis manos. Intento recordar sin mucha dificultad el diseño de mi coche y lo termino plasmando en el coche de mi cuñada con su nombre, claro. Tras hacer esto Héctor se ofrece para salir del taller y pedir unos cafés a Kike mientras que yo meto el coche de Abi en la sala de secado y hago entrar mi coche al taller de pintura para plasmar el recuerdo de mi dibujo en mi coche de nuevo. Lo que quiero conseguir es que ambas tengamos nuestros aerografiados similares. Tras cuatro horas y tres cafés puedo terminar de meter mi coche en la sala de secado y dar por finalizado el trabajo. Me quito el equipo protector y lo pongo sobre la mesa de metal junto al de Héctor y salimos afuera para tonar el aire fresco.
-¿Sabes? Eres buena para J.D.- me dice de repente cuando nos sentamos en una mesa a tomar una Coca-Cola. Lo miro con el ceño fruncido y espero a que se explique- la vida que llevaba antes no era... buena. Tú simplemente haz lo que estás haciendo hasta ahora por favor- me dice mientras sonríe agradecido.
-Lo haré, no te preocupes- le aseguro mientras le devuelvo la sonrisa tranquilizadora.

Tomo las llaves de mi bolsillo trasero y abro la puerta deseando entrar en casa y ducharme por fin. En el instante en que abro la puerta me doy media vuelta y despido a Héctor con la mano para indicarle que todo está bien y que se puede marchar. Él asiente con la cabeza y se marchar, seguro deseando llegar con Tania. Entro al salón y veo que no hay nadie pero la tele está puesta, seguro que fue mi hermano o J.D. porque es fútbol lo que hay puesto. Me acerc a la barra americana y veo una lata de cerveza vacía, la tomo y la tiro a la basura. Me acerco al frigorífico y tomo un Redbull de él y comienzo a bebermelo mientras que llego a la planta alta. Camino hasta mi habitación lentamente y entro mientras doy sorbos a mi bebida. Suelto en una esquina el pequeño macuto que siempre llevo a trabajar y me enciedo un cigarro decidida a buscar algo cómodo para ponerme. Finalmente me decido por una camiseta de mangas cortas ceñida al cuerpo negra con un dibujo que simila un graffiti, un pantalón de chandal verde agua y negro y por último, mis tenis negras. Lo agarro todo en mis manos y me dirijo hasta el baño. Es entonces cuando escucho la voz de una mujer en el despacho de J.D. Dejo en el baño la ropa y salgo al pasillo en dirección al despacho de J.D. Me acerco y escucho una voz chillona que reconocería hasta bajo del agua. Agarro el pomo de la puerta y la abro lentamente, encontrándome a J.D. apoyado en la mesa de su despacho y a Natacha a un metro más o menos de él. Entro al despacho y es cuando me doy cuenta de la mirada sombríade J.D.
-Bueno querido, yo ya hice mi trabajo, nos vemos- dice Natacha mientras agarra un bolso y se marcha. Justo cuando va a pasar por mi lado una sonrisa victoriosa se instala en su rostro y veo que está tramando algo. Escucho como cierra la puerta detrás de mí y miro a J.D. esperando una respuesta.
-Sólo espero que me puedas aclarara esto...- me dice J.D. en un tono bastante enfadado.

--------------------------------------------------------------

Chicas, Mi asfalto, tu cuerpo va terminando. Le quedan unos cinco capítulos pero habrá segunda parte solo que ésta no será una continuacion sino la narración de la historia por J.D. Pronto os pondré al corriente de todo, eso sí, comentad que os parece la idea.

Ahora las preguntas del millón ¿que hacía Natacha con J.D.? ¿qué pasará para que J.D. esté enfadado? Se admiten apuestas en los comentarios... Un beso chcas!!

Mi asfalto, tu cuerpo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora