Capítulo 4

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El ascensor se cierra mientras veo sus hermosos ojos verdes llenos de lágrimas suplicándome que no lo deje, pero no puedo.

No puedo quedarme, no puedo hacer como si nada pasó, no puedo olvidar que todo fue falso, todo fue fingido, y ahora.. ahora no sé si en realidad me ama o solo es parte de su farsa, no sé si en cuanto yo me vaya él va a correr a los brazos de Sara y a engañarme como ya lo hizo antes..

Mis entrañas se revuelven y el nudo en mi garganta comienza a impedirme respirar. Las lágrimas nublan mi visión y solo puedo cubrirme el rostro.

Estoy aquí, bajando el ascensor, huyendo del hombre que amo, dejándolo todo atrás.

Sola.

Cuando salgo del ascensor y posteriormente del edificio, el hombre encargado de llevar mis cosas me está esperando afuera en su camioneta, el destartalado auto luce tal cual como un auto de mudanzas.

Abro la puerta de mi auto y entro en él. El hombre me hace ceñas para que lo siga y enciendo el auto. La vieja camioneta va de forma lenta por las calles de L.U mientras yo lo sigo algo irritada. Ya se me había informado que el apartamento que elegí queda a más de media hora de aquí, precisamente por eso lo elegí, pero estoy segura que al paso que este hombre va en su camioneta roja y oxidada vamos a tardar al menos cuarenta minutos.

Poco a poco los edificios académicos disminuyen en número. Puedo ver los edificios de las áreas de química, ciencias políticas, sociología, psicología e Ingenierías quedarse atrás mientras avanzamos hasta la parte norte del campus. Nunca había venido aquí antes, y mientras más en el norte estamos, más silencio y relativa calma encuentro. Ahora estoy segura de algo, este silencio y calma me pueden ayudar a salir de esto o, definitivamente van a arruinarme por completo.

Luego de casi cuarenta y cinco minutos me encuentro enfrente de los apartamentos. La sorpresa llega a mi al verlos en realidad cómo lucen. Son definitivamente hermosos, imponentes y se ven caros, definitivamente caros.

La idea de que luzcan de esa forma comienza a molestarme un poco, nunca he sido la tipica chica material, de hecho no me gustan los regalos, por eso el solo hecho de que ahora viviré aquí comienza a darme un poco de malestar. La única razón que me obligó a vivir aquí fue alejarme de él, y en cierta parte darle un castigo a mi padre por lo que hizo, aunque esto no será lo único que deberá afrontar por hacer la estupidez que hizo.

En realidad no planeaba volver a hablar con papá, no por mucho tiempo, pero solo lo hice por interés, el interés que hoy me tiene aquí, llegando a mi nuevo "hogar".

Una risa irónica me asalta ante la idea de la palabra hogar, mi hogar era Harry, y ahora no hay nada, mi hogar fue demolido por completo, y en su remplazo, tengo un gran, nuevo, estúpido y vacío apartamento para ahogarme en el dolor.

En mi dolor.

Para mi sorpresa, los apartamentos no se encuentran en un conjunto cerrado, lo que de cierta manera me alivia porque los hace más normales y menos frívolos y superficiales. Los apartamentos están en torres de solo cinco pisos, los edificios son de colores pastel, agregando una pizca más de diseño y lujo como si ya no tuviera suficiente de eso.

En qué me metí.

Me maldigo mentalmente por elegir vivir aquí, parece demasiado costoso y fino, se siente incomodo y demasiado superficial. Me siento como un mosco en la leche y eso hace que me den ganas de vomitar.

El hombre avanza unos metros más en su camioneta y de pronto me siento maravillada con ver su auto, se ve normal, es lo único normal aquí. Luego de recorrer un poco más se estaciona y me indica que me detenga. Se baja del auto y me habla.

Only You 2 ¿De qué estamos hechos? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora