My Delirium

19. No me jodas...

#Jack.

Salí del dormitorio y subí las escaleras hasta la 6ª planta.

Las chicas pasaban por mi lado, y descaradamente me echaban un ojo. Costumbre.

-Qué tal, señoritas.- dije seductoramente mientras seguía subiendo las escaleras y llegaba al piso.

Sin siquiera tocar la puerta n° 681, se abrió de par en par y un molesto Clain me dio paso para entrar en su dormitorio.

-Si ella reclama sobre lo que has hecho te podrían expulsar, ¿sabías?

-Pues claro que lo sabía, idiota- Dije riendo.

Clain sonrió confundido y se apoyó en la puerta.

-¿Qué tramas, Jack?

Levanté los brazos, asombrado.

-Cómo sabes que tramo algo.

Me senté en la silla, con el respaldo frente a mí y las piernas separadas.

-Te conozco, hermano- dijo señalándome con el índice.- Habla.

-Acostarme con Kylie...- dije mientras cerraba los ojos y suspiraba lentamente. Gozando.

-Jack...

Clain estaba enganchado con Kylie, ni que fuera ciego. Todos lo sabían... Todos menos Kyls. Y también sabía que si seguía hablando de su cuerpazo me llevaría un gran golpe, pero este hombre no me asustaba ni de chiste.

-Sabías que estaba borracha y casi inconsciente, Jack. Te podría demandar por violación o algo por el estilo.

Ni de broma. No se atrevería a quedar con la vergüenza de ser la niñata manoseada, o la idea de que su hermanito sepa cómo "terminó" nuestra apuesta... no le vendría bien a ninguno de los dos, para ser honestos.

Me pasé las palmas de las manos por la cara dramáticamente y exhalé fuerte. Mientras más desesperado me hacía ver, más graciosa era la cara aterrada de Clain.

Lo miré durante un minuto silencioso mientras jugaba con mis dedos.

-No me acosté con Kylie.

**********
-Sí, estaba borracho pero no tanto, así que cuando Kyls me pidió llevarla en la espalda no pude decir que no- sonreí-. Cuándo llegamos al dormitorio ya se había quedado dormida sobre mí por lo que la dejé en mi cama (soy demasiado generoso como para dejar que duerma sola) y se me ocurrió la idea de aprovechar un poquito la situación..., ya sabes, necesito ayuda en casa. Así fue como despertó en ropa interior y pensó que se cargó la apuesta.

-Le hiciste creer que perdió porque necesitas ayuda urgentemente...?

-Seh- dije recostándome en la cama de su compañero de habitación.

-¿No habría sido más fácil pedirle ayuda?

Reí.

-Estas loco, Clain. No habría aceptado nunca.

Clain me observó durante un tiempo demasiado largo para ser un hombre que ha tenido más novias que la cantidad de dedos de mis manos.

-Sabes que ella lo habría hecho, Jack.

-Contigo- rematé-. Kyls lo haría si fueras tú. Yo estoy fuera de su lista de amistades.

Clain se echó a reír.

-Si te hace sentir mejor...eres el primero de su lista negra.

-Harás que me sonroje- dije sarcástico.