1

9.5K 633 10
                                    

Me levanto como siempre en estos últimos días; sin alarma que me despierte ni voz que me lo sugiera. Me siento extraño porque no recuerdo lo que he hecho en esta última semana, pero pues no importa, ya que mis días últimamente son aburridos.

De nuevo, el lado izquierdo de mi cama está vacío, otro día que no duermes a mi lado. ¿Acaso que he hecho mal?, ya va también una semana que pasa esto.

Me levanto molesto y desilusionado, camino hasta la sala del apartamento.

Como supuse, duermes en el sofá, con un cobertor de cuadros que tú misma hiciste, que medio te cubre las piernas, con ese ridículo pijama rosa que me da risa. Cómo enojarme contigo mi amada Elena, eres tan bella con tu pelo caoba acaramelado, que a pesar de estar desordenado te sienta tan bien. Me encanta como duermes, como luces recién levantada.

Sé que no te gusta que te despierten cuando duermes tan tranquilamente, decido dejar mi reclamo para después y arreglarme para otro día de trabajo. 

El último adiós ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora