•Narracion externa•
-Una niña. Es una niña.-Dijo el cojo, saliendo de la habitación con una gran sonrisa. Eva se levantó del suelo del pasillo y se acercó a recoger el bulto que el hombre traía en brazos. L también se acercó a verla. La sonrisa del cojo se borró en un momento.-Pero tenemos un problema.-Ambos levantaron la vista de la bebé con cara de preocupación.-Carol... ha perdidido mucha sangre y está cansada. No estoy seguro de que pase de esta noche.
-Pero podemos darla sangre y...
-No, ella a dicho que no quiere que hagáis eso. Dice que si se recupera bien, si muere será cosa suya.
-¿Y su hija?-Interviene L.-¿No le importa?
-Claro que le importa, pero es una obligación.
-¿Cómo una obligación? ¿A qué se refiere?
-A la vacuna. Vamos a empezar dentro de un poco, si no fuese a hacerlo podría recuperarse con tranquilidad. Pero no me fio.
-¡¿Prefiere matar a su hija?!-Exclama Eva, quien aumenta su sorpresa por momentos.
-Si hace falta lo haré. Recordad que mi hija es la cura, nada más.
-¿Nada más? ¿No le importa?-Preguntó Eva, sorprendida por la carencia de cariño que sentía hacia su hija.
-Ahora mismo morir es sólo una solución. Ella decidió hacer esto.
-¡Porque no tenía opción!
-Será mejor que se lo expliquéis al resto. Sólo faltan dos horas, Preparad vuestras cosas.
-¿Dos horas? ¿Para qué?-Pero el cojo no respondió. Volvió a la sala de antes dejando a la pareja en el pasillo.-¿Dos horas para qué, L?-Él suspiró antes de hablar.
-Nos vamos, prepara tus cosas mientras yo aviso al resto.-Salió hacia las habitaciones sin dejarla hablar. Ella tardó un par de segundos en reaccionar e ir detrás de él. En su cabeza sólo rondaba una frase: "Nos vamos."
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Lo sé, es cortísimo y con el tiempo que llevo debería haber escrito más. Pero últimamente no descanso bien y llevo bastante sin escribir. Os prometo que el siguiente capítulo será cien veces mejor que este. Lo siento y comprendo que queráis matarme y od doy toda la razón del mundo, pero os pido un poco de comprensión.
Besos y abrazos :)
