Después de la excelente noche que había tenido, decidí abrir mis ojos; pues me sentía atrapada... Algo me ahogaba. Claro, como no estarlo si Jake me tenía abrazada. Primera vez que amanecía abrazada con alguien.
Con cuidado quité su cuerpo que estaba sobre el mío y logré bajar de la cama sin despertarlo.Mi reloj marcaba las nueve de la mañana. Fui hasta el baño, me di una placentera y relajante ducha.
Al salir y secar mi cabello noté un bolso en el cimiento del baño, lo abrí con curiosidad... Había ropa y zapatos de mi talla. Jake tenía todo bien planeado.
Coloqué un jean prelavado con semi-rotos que dejaban ver un poco de mis piernas. Una blusa blanca de tirantes que se adhería a mi cuerpo, y por encima de ella, una chaqueta de cuero café con detalles dorados. Seguí buscando en el bolso y encontré unos botines del color de la chaqueta. Más al fondo había maquillaje en tonos tierra, he de suponer que nada se le escapaba.
Una vez lista salí, fui por mi bolsa y todo esto tratando de no hacer mucho ruido... Jake estaba profundamente dormido.
Tomé papel y lápiz, había decidido dejarle una nota...
-Jake,
Tuve que retirarme.
Gracias por pensar hasta en el más mínimo detalle,
sin dejar de destacar tu excelente gusto.
Nos vemos pronto,
Brittany.-Dejé la nota en la mesa de noche y encima le coloque su teléfono pisando el papel para que lo pudiera ver.
Encendí mi camioneta, coloque el cable auxiliar en mi móvil y di a reproducirse aleatoriamente mi lista de canciones. No sabía a donde iba, pero necesitaba pensar. Necesitaba estar sola. Debía pensar unas cuantas cosas.
Y pareciese que para agregar más intensidad al momento, comenzó a sonar en el reproductor una de las intensas y extravagantes letras de Ricardo Arjona
"Cabe un siglo en este martes por la noche,
dueles más que el peor dolor que se inventó,
el espejo lanza dardos de reproche, hoy empieza lo que ya se terminó...
La esperanza se tiró por la ventana,
el insomnio se quedó a vivir aquí,
el ayer lo dejó todo pa' mañana,
y el mañana cuando esté,
yo ya me fui..."Decidí parar y bajar de mi auto... Al mirar a mí alrededor no tenía más que agua.
¡Estaba en la playa!
Quité los botines, la chaqueta y bajé de la Range Rover.
Caminé, caminé y caminé sin parar; sentía mis pies hundirse en la suave arena, la brisa rozar mi rostro y alborotar mi cabello, mis pulmones llenarse de aire puro. Yo solo respiraba profundo, pero de pronto llegó un recuerdo a mi mente...
Corría de niña por la playa y el agua salada llegaba hasta mis pies.Observaba de lejos a mis padres hablar; me sentía feliz. Era una niña con una familia, prototipo de cualquier sociedad, disfrutaba de eso en cualquier aspecto. Pero como siempre tras ese recuerdo hermoso, venía otro que dañaba el perfecto retrato familiar. Mis padres ya no hablaban... Discutían, gritaban y a pesar de que estábamos en la playa, mi madre ya no sonreía, lloraba. Y mi padre estaba molesto, no sabía el porqué si rato atrás la situación era otra.
Las peleas como estas eran incansables e innumerables. Mis padres siempre peleaban en casa, mi padre pegaba a mi madre y decía palabras ofensivas. Yo solo lloraba en un rincón de mi recamara, era solo una niña y no entendía porque mis padres no podían estar bien, sobre todo cuando veía familias cercanas quererse, respetarse y convivir como personas civilizadas.
Crecí en medio de peleas incontrolables. Mi padre cada vez era más agresivo. No quería oírlos pelear más, pero mientras pasaba el tiempo lograba entender que ya mis padres no se querían y que solo estaban juntos por mantener una apariencia de "familia feliz"; lo que ellos no sabían, era que me hacían daño y ante los demás aparentaban todo lo contrario.
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HOY ERES MÍO
عاطفيةBrittany Minner Una persona que gracias a decepciones familiares y amorosas, se convierte en una mujer regia, eficiente, luchadora, al principio fuerte como piedra y un tanto arisca; la vida la enseña y la lleva darse cuenta que el goce de la mis...