(Mery)
Cogí prestado un libro sobre Inglaterra de la biblioteca. Y me acordé de revisar el buzón después del instituto, rezando para que la carta de información hubiera llegado.
Encontré una fina carta del programa, imposible que contuviera toda la información.
Rasgo el sobre para abrirlo, mientras deslizo un dedo por los pliegues. Éste es mi billete de salida, mi oportunidad para alejarme de Daniel y Paraíso. Tiempo para olvidar el accidente y conseguir un espíritu de independencia y anonimidad.
Despliego la carta rápidamente. Tengo una gran sonrisa en el rostro mientras voy leyendo la carta.
Para: La Srta. Mery Dail.
Del: Programa Estudiantil de Intercambio Internacional (PEI)
Estimada Srta. Dail:
Ha llamado la atención de nuestro comité de PEI que la beca para la que usted originalmente solicitó, era una beca deportiva. Ya que sus archivos indican que usted no ha sido seleccionada en su instituto para el equipo de atletismo en los últimos doce meses, lamento informarle que su beca ha sido denegada.
Acatamos los parámetros legales de distribuir las becas deportivas solamente a los atletas actuales.
Sin embargo, todavía es bienvenida a participar en el programa de PEI, si es patrocinado por usted, en lo cual estaría a cargo de su propio transporte y el coste de la matrícula que incluye el cuarto/u alojamiento y la entrada al campus de la Universidad de Oxford. El coste de la matrícula durante un semestre en el programa de PEI es de 3.859€.
Por favor remita el pago el 15 de Diciembre a la oficina de PEI para separar su cupo en el programa. Si tiene alguna duda, por favor no dude en contactarme.
Atentamente,
Helena Cortés,
Presidenta, del Programa Estudiantil de Intercambio Internacional.
Universidad de Oxford, Inglaterra.
Cuando mi cerebro por fin comprende las palabras *beca denegada*, mi sonrisa se marchita al instante.
— No puedo ir.—susurro. Mamá tuvo que trabajar horas extras solo para comprarme un conjunto de ropa. No hay ninguna manera para darnos el lujo de gastar casi cuatro mil euros más. Cierro los ojos. Esto no está pasando. No ahora.
Mis manos empiezan a temblar de nuevo. Las siento estremecerse cuando me cubro los ojos con las palmas de las manos.Cuando mamá llega de trabajar, le doy la carta para que la lea.
— Vale, no te asustes.—dice después de leerla.— Debe haber alguna manera para solucionar esto.
— Mamá, es inútil hasta pensarlo. No tenemos esa cantidad de dinero.
— Mi jefe podría dejarme trabajar más horas extras. Veamos...—agarra un trozo de papel y empieza a hacer cálculos.
— Mamá, déjalo.
— Espera. Sesenta horas mínimo por semana, a veces setenta... y si trabajo el día de Pascua y le sumamos mi bono de Navidad...

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Dejando Paraiso ||Completada.
FanfictionNada ha vuelto a ser igual desde la noche en que Daniel Oviedo salió de una fiesta, se puso al volante y terminó atropellando a Mery Dail. Tras meses de dura y dolorosa rehabilitación Mery ha vuelto a caminar, pero le ha quedado una cojera de por v...