Cambiando el futuro (James Potter y tu)

capitulo 40

—No puedo creer que Slughorn te diera una botella de Felix Felicis—murmuraba Lily viéndome recelosa

—no me la regaló, yo la elaboré, fue la mejor y como premio el profesor me dio una botella de esta—menciono mientras le doy una sonrisa triunfante y caminaba hacia donde estaban Sirius y James.

—Canuto...

— ¿me regalaras la botella verdad? —pregunta esperanzado viéndome

—no, este tipo de... cosas solo se deben usar en cosas importantes, la guardaremos y ya

— ¿de verdad? —pregunta James viéndome a lo que simplemente asentí.

De pronto entra Margaret Miller caminando sonrojada hacia nosotros, miraba a James con cara de enamorada y completamente sonrojada la niña de trece años me entrega un pergamino con un sello tan conocido que solo agradezco haciendo que la chica se fuera completamente nerviosa.

—eres mala pelirroja

— ¿yo? No he hecho nada—susurro mientras abro el pergamino.

Querida ______:

¿Cómo has pasado estos días? He oído rumores muy... entretenedores sobre el joven Potter y tú, primeramente quiero decirte ¡En hora buena! Ustedes dos hacen, en mi más humilde opinión, una pareja completamente adorable... ¿podría interrumpir tu descanso el día de mañana? Me gustaría pedirte, siendo consciente de que tienes autorización por los señores McKinnon de ir a Hogsmeade, que me acompañes a una misión muy importante que consiste en...bueno, mañana te lo comentare.

Con cariño,

Albus Dumbledore.

Mi mirada queda en el pergamino mientras lo tiraba al fuego y hacia que se quemara hasta quedar en cenizas, James y Sirius me miran preocupados pero les sonrío mientras me siento en medio de ambos.

— ¿Qué ocurre?

—Nada Jaime... todo está bien... solo que... no podremos ir justo a Hogsmeade mañana, lo lamento—le menciono mientras bajo mi vista

— ¿Qué? ¿Por qué?

—Dumbledore quiere que lo acompañe a...bueno, no lo sé....

—¿no sabes?

—es una misión secreta o algo así, no me ha dicho nada... creo que es sorpresa—respondo mientras le restó importancia—sirius... ¿Dónde está Marlene?

—con el idiota de Petricks... no sé porque están juntos en Aritmancia... ¿Por qué?

—tal vez porque yo no estoy en esa clase... no sé, solo digo

— ¿Por qué no estás en esa clase? —pregunta Sirius curioso viéndome

—porque no me servirá en nada...simplemente es una clase que no me interesa.

—pero si te hablamos de Oclumancia...—susurra Sirius viéndome

—No la necesito, aprendí el arte de la Oclumancia cuando tenía doce—le digo mientras veo a James quien tenía una mirada de orgullo.

—Eres... por merlín, no puedo competir contigo enana—dice Sirius riendo mientras James tomaba mi mano y me hacía levantarme, mientras salíamos de la sala común pudimos apreciar a Peter con Mary. James hizo una cara de sorpresa que causo más que risa en mí y corriendo prácticamente de ahí, llegamos a la sala que viene y va.

— ¿Qué quieres hacer?

— ¿Qué me recomiendas? —le susurro mientras nos acercábamos cada vez mas