Cap 22 Todo esta echo para ser roto.

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PoV Bellota

__bueno....Boomer fue el primero -me dijo Jack- el era...Muy diferente a lo que es ahora.

__en que sentido? -pregunté curiosa.

__veras...el tenia autismo.

__¿autismo? -lo mire extrañada- ¿que diablos es eso?

__es una enfermedad.

FlashBack Desde El Punto De Vista De Boomer《

__señor Boomer. El Dr.Jack vino a visitarlo -una voz aguda y femenina hizo eco en mi cuarto. Alce la vista y me encontré con....La verdad es que no sabía su nombre sólo sabías que mi madre le pagaba para que se hiciera cargo de mi. Le dediqué una mirada de disgusto, chasque la lengua como diciendo: no me interesa.

Me miró indiferente para luego desaparecer tras aquella puerta azul marino por la cual yo nunca cruzaba. Escuche como le decía al supuesto Doctor Jack que no quería verlo ni hablar con él que por favor se marchase. Otra voz más ronca dijo que volvería pronto. Golpee la pared con mi puño cerrado ¿Es que no podían dejarme tranquilo? ¿Tan divertido era molestarme? Divertido sería ver como todos se pudren malditos, pensé mientras sacaba un par de lápices y comenzar a rayar la pared.

Mi habitación se inundó por el perfecto silencio, sólo podía escuchar el tic-toc del reloj. De repente mi estómago emitió un extraño sonido, tenía hambre y mucha. Me voltee y vi sobre mi pequeña mesa una bandeja con un sándwich de jamón y junto a este un sumo de naranja que aquella chica me había dejando sabiendo que no pensaba salir de mi cuarto.

Hacia tres meses que no salía, mis ventanas estaban cerradas con seguro y las cortinas evitaban cualquier contacto con la luz, odiaba con toda mi alma el exterior, odiaba todo lo que no fuese mi habitación. Aquel pequeño lugar con las paredes rayadas por mi era mi mundo, era mi todo. Mi cama era un adorno al igual que los muebles, tiraba las cobijas al suelo y dormía sobre ellas. Mis lápices de colores siempre estaban con buena punta fina y listos para ser utilizados como se debía, no necesita goma de borrar ya que todo lo que hacía era perfecto.

Y esa era mi vida, estar en mi cuarto rayando las paredes dibujado las cosas que más me gustaban como dormir, comer o hablar conmigo mismo. Era realmente divertido.

Una tarde mientras dibujaba tranquilamente alguien llegó a mi casa, era Jack que, como había prometido, había vuelto para poder hablar conmigo. Apreté los dientes, la escena del día anterior se repetía, aquella mujer horrenda entraba a mi cuarto avisándome que el supuesto Jack había llegado y que esta vez no se iría sin antes hablar conmigo. Casi rompo uno de mis lápices por la rabia que me agarró al ver la figura de un hombre entrando por la puerta de mi cuarto.

__buenas tardes Boomer -sentí un sabor amargo en mi boca al escuchar mi nombre en aquella voz.

__¿que quieres? -dije seco y el me miro sorprendido.

__bueno veras....¿Podría dejarnos solos? -le dijo a la chica que me cuidaba, esta asintió y rápidamente salió de mi cuarto cerrando la puerta tras ella- bueno veras. Tu madre me envio porque esta muy preocupada por ti Boomer.

Alce una ceja- ¿mi mamá dijo eso? -el sonrió y asintió- no mientas.

__¿por que crees que miento? -se agachó para quedar a mi altura.

__mentir esta mal ¿Cierto? Para colmo eres adulto ¿Qué te cuesta decirme la verdad?

Jack me miro incrédulo y luego con pena. Odiaba esa mirada. Podía darme cuenta de lo que intentaba cuando me miraba fijamente a los ojos.

Mírame.Por las buenas o por las malasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora