Nuevo comienzo | ZASHLEY ♥ [EN EDICIÓN]

08. Madrugada

Capítulo actualizado.

Había sido una noche larguísima. Para empezar, al término de la cena, finalmente llegó Selena y su madre. Junto a Miley le habíamos preparamos la habitación en donde le hicimos un collage con nuestras mejores fotos para recibirla, hacía mucho tiempo que no la veíamos y la verdad era que la extrañaba demasiado.

Fue inevitable ver cómo Vanessa le coqueteaba a Zac durante el resto de noche, cosa que trataba de mantener en frío, pero era imposible cuando todo el tiempo lo abrazaba del cuello. ¿Cómo no se daba cuenta de su incomodidad? Cualquier persona que los veía podía fijarse en que quería zafarse de ella, pero no podía.

Admiraba lo caballero que podía ser. Además, Miley me molestaba diciendo que sólo me miraba a mí, aunque sabía que eso no era cierto, pues se lo desmentí inmediatamente.

Era en esos momentos en los que deseaba descansar y distraerme de mis pensamientos. Había pensado por un momento conectarme y hablar con aquel desconocido que había tenido el placer de "conocer", o simplemente lanzarme en la cama y dormir hasta más no poder.

Nos quedaban dos días de descanso y no quería volver al instituto, ver a las mismas personas de siempre y tener la misma rutina. Menos sabiendo que estaría el grupo de Vanessa, a Drew y ver con quien me había sido infiel.

Desde que lo vi engañarme en mi propia cara no había tenido el desagrado y no había querido hablar con él. Siempre intentaba evitarlo a de todas las maneras posibles. Incluso, me había distanciado del grupo de "amigos" que teníamos antes, ahora sólo me juntaba con Miley, bueno, y ahora con Selena, ya que vuelve a estudiar con nosotras.

Oí un ruido que me hizo ponerme en alerta. Nuevamente el ruido sonó, hasta que me di cuenta que una piedra golpeaba mi ventana. Quise no darle importancia, pues pensé que solo era el viento, sin embargo, una tercera vez me hizo remover de mi posición, así que me levanté a regañadientes de la cama, pues aún no podía dormir.

Tomé la bata, y me asomé lentamente por la ventana. Olvidé mencionar que mi Suite estaba en el segundo piso, frente a la piscina de exterior.

—Zac —susurré, aun sabiendo que él no me oía.

Le hice señas intentando descifrar que es lo que decía, pero solo entendí que quería que bajara. Bien, lo iba a hacer. Pero antes debía cambiarme, de igual forma le dije que me esperara con la mano. Él asintió con la cabeza y una hermosa sonrisa que era iluminada por la luna.

Después de unos minutos, descendí con abrigo.

—Zac —llamé su atención, mientras mantenía la mirada fija en la piscina —, ¿para qué querías que bajara a esta hora? —pregunté sentándome a su lado. Si bien era una noche fría, el agua temperada estaba bien, así que sumergí mis pies en la cálida agua, imitando su acción.