Veintiuno. - Moments.

229 20 11
                                    


Antes que comiencen a leer, quería pedirles una enorme disculpa.

Sé que lo he dicho varias veces, pero ahora que entré a clases se me hace complicado, pero intento hacer lo mejor posible para que disfruten cada capítulo y agradecer a mis fieles seguidoras que leen, comentan y votan. Por eso le sigo. 

¡Gracias totales!

...


***Narra Ashley***

Fue inevitable contenerme. Me llegaron imágenes de cuando éramos niños y jugábamos de esa manera, y solo quería revivirlo por una vez más. A lo mejor él no se recordaba, pero yo sí.

¿Han sentido esa necesidad de querer volver a su niñez? Sí, volver a ser pequeños para no tener tantas responsabilidades.

Así me sentí yo.

Quería que el tiempo se detuviera tal y como estaba, pero no todo es para siempre.

Llegamos al teatro, afortunadamente no nos retrasamos como la clase pasada, ahí me esperaban mis dos mejores amigas, por supuesto nos guardaron un lugar para estar al lado de ellas.

Estuvimos ensayando por más de hora y media, hasta que por fin la señora Darbus nos dio libre, pensando en que Zack también tenía que practicar con su equipo para estar preparados, pronto sería la semifinal, no siempre el equipo de básquet ha llegado tan lejos con un nuevo capitán.

- ¿Estás cansado? – Consulté con voz leve a Zack. Quién bebía un sorbo de gaseosa. –

- Un poco, pero debo ir a entrenar, ya sabes... son responsabilidades que tomé al ponerme el equipo en el hombro, como dicen. – Me dedicó una sonrisa de lado. –

Eso lo hace ver tan sexy.

No, no. Concentración Ashley.

Sacudí la cabeza para no pensar cosas fuera de lugar y hablé.

- Te acompaño. – Propuse, claro que no aceptaré un no como respuesta. –

Le devolví en una leve sonrisa, un tanto tímida por mi parte.

Sigo avergonzada por todo lo que ha estado pasado últimamente, pero creo que mis sentimientos hacia él no han cambiado como lo pensé por un momento.

Cada minuto que estoy cerca de Zack, siento sensaciones extrañas en todo mi ser, no solo físicas, sino que, psicológicas. Podría decir que incluso lo encuentro como una inyección de "vida" cuando estoy triste o bajoneada.

Zack me quedó mirando por unos segundos con sexy sonrisa, bajó la cabeza y asintió ¿avergonzado?

Sin pensarlo dos veces, corrí a tomar mis cosas y a despedirme de mis mejores amigas, por no decir que lo hice solo con señas.

Sé que me entenderán.

- ¡Lista! – Manifesté evidentemente feliz. –

Nos dirigimos a la cancha de entrenamiento, y me senté en las butacas que tienen para el público.

Me da pena ir a saludar al equipo con él, así que me senté callada y observé a los chicos entrenar.

No niego que todos tienen unos cuerpos fascinantes, que cualquier – menos yo – mujer querría, claro.

En eso vibra mi móvil, es Keenan.

¿Qué diablos querrá ahora? Justo en el mejor momento.

Bufé y contesté con no mucho agrado.

Nuevo comienzo | ZASHLEY ♥ [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora