Carta de un Enfermo mental enamorado.

28. Una historia inocente.

~CONTENIDO VIOLENTO~

Pero ¿Cual era su objetivo con él? Fácil, Samuel era la única persona que había logrado espantar el ente de su hermano, sí, aquel repulsivo ser que destruía la mente alterada de Linek era la imaginaria ilusión de que él le observaba cada día, el ente que susurraba a sus oídos el "Mátalos, ellos podrían haber sido mi asesino, todos podrían haber sido mi asesino" terminando con la vida de más de treinta víctimas, todo el mundo lo repudiaba, o eso pensaba, la poca familia que tenia simplemente era su madre, su padre y su difunto hermano que Linek juraba que estaba allí, nadie se lo negaba al no tener contacto social más que una simple cara, saludo y despedida sin saber quien era en realidad, alterando el propio espíritu de su hermano en un ente peligroso y extremo a tal nivel de distorsionar la realidad, Linek vivía aterrado en una casa de adopción, luego que lo encontrarán junto a su madre ya en un estado de putrefacción, en posición fetal a su lado, les fue difícil sacarlo de ahí sin que gritara y llorara, a su corta edad el trauma carcomía su sentido común, representando que un niño normal no sería.

El pueblo donde vivían era clase media y al no tener familiares, abuelos muertos, sin tíos ni meno hermanos, lo dejaron en el reformatorio más cercano del cual logró escapar meses después. Completando su vida viviendo en la calle o en hogares de Cristo, donde encontró a Dios gracias a unos humildes adultos que lo encontraron mendigando comida a la edad de 15 años. Donde acabó con la vida de los cuatro adultos, tres mujeres y un anciano, utilizando sus propias manos como arma en el anciano ahorcando su cuello hasta los ojos del viejo explotarán por la presión. Las mujeres fueron brutalmente violadas, Linek nunca había tenido experiencia sexual pero si la había visto cuando se escabulló en un prostíbulo, despertando sus ganas insaciables de practicar lo mismo.

Pero hacerlo a la fuerza con las tres chicas fue mucho más satisfactorio, no llegando a tomar razón del asunto, rasguñando sus pieles y usando objetos con filos para quitar carne de los pobres cuerpos , su mente había perdido el control. El gusto caníbal lo estaba seduciendo, induciendo sus fantasías a continuar a su corta edad.

"Si Dios esta ahí para ti ¿Por qué no estuvo cuando mi hermano murió? " Era lo que gritaba una y vez empalando a las chicas moribundas, quien terminaba por abrazar sintiendo lastimas por ellas.

"Él podría haberte salvado de mi" Susurraba cerca de sus oídos, oyendo sus últimos sollozos y latidos antes de dejarlas tiradas.

Li se enamoró dos veces y se casó ilegalmente con una, la primera fue a los 18, cuando una chica Scout lo encontró durmiendo arriba de unas ramas gruesas de árboles macizos, ella lo ayudó a mantenerse en calma pues sabía de su condición, le enseñó primeros auxilios y como usar diferente tipo de instrumentos, cuerdas, cuchillos, navajas, cazar e incluso cocinar. Sin saber que todo eso podía haberlo utilizado en su contra.

Acabó con su vida cuando Linek en un arranque de irá por no poder cazar un conejo con el arma blanca, terminó lanzandola a la chica que trataba de alejarlo del pobre animal. Mal momento, la cuchilla cruzó su ojo derecho incrustada allí, murió de inmediato y Linek escapó por lo que había hecho. No supo que hacer y sus sentimientos desaparecieron de inmediato.

Las drogas nunca fue lo suyo, de hecho la poca compañía que tuvo fueron con drogadictos de calle, con quien no hablaba pero ellos le molestaban, muchos no salían vivos, pero lograba ganar respeto y miedo sin saberlo él mismo, varios se acercaban a él buscando ser su amigo pero no su enemigo, como si tratarán de asegurar su vida, pero Linek no era asesino por gusto, de hecho, nunca se daba cuenta cuando estaba terminando con la vida de alguien, más que después de relajar sus músculos y dejar la víctima tirada en un río de sangre, varias veces sin una parte de su cuerpo.

La policía ya lo buscaba desde ese entonces. Pero Linek comenzó a ser más inteligente y escapaba apenas oía las radios describir su físico, los lugares rurales siempre eran su escondite preferido. Muchas veces acababa con la vida de familias completas para quedarse con la propiedad y vivir allí unos días y volver a escapar.

Aplicó el canibalismo por primera vez cuando ya no quedaba comida en la alcena, el cuerpo de una pobre anciana todavía estaba tirado en el sofá y decidió probar, las voces eran agudas cuando estaba a punto de hacer algo que nunca hacia, él también esperaba ansioso.

Despedazó la ropa de la anciana, un vestido floreado y un delantal rosa que tenia por nombre "Mommy Love U" lo colocó en el suelo como mantel, buscó un cuchillo carnicero y sin siquiera sentir repudio mutiló los brazos de ella, desollando la arrugada piel para tirarla al cesto de basura y dejar los miembros en el mantel quien de inmediato se tornó rojo por la sangre. En resumen, cocinó la carne y la sirvió como si fuera de vacuno, ninguna diferencia en el sabor, solo más dura.

Su vida continuó macabra, ataques de rabia, estados de trance absoluto, infecciones, vómitos rojos, voces agudas, insomnio, frío, canibalismo y ganas de tortura, alucinaciones y por sobre todo. Las ganas de continuar.

El olor a cuerpo podrido o calcinado lo obligaba diariamente a escapar por las sospechas, dejando cuerpos a medio mutilar, pedazos de piel esparcidas como trapos en el piso, siempre dejaba evidencia, nunca supo ocultarlo, simplemente escapaba pues ni él sabía que llegaba a esos niveles.

Aprendió a conducir gracias a un fiel amigo anarquista con quien compartió la casa, terminó acabando con su vida como lo era obvio pero Linek no supo por qué, simplemente despertó semidesnudo con el a un lado, sin mandíbula y un tajo gigantesco cruzando su abdomen.

Fue allí donde supo que no podía estar con nadie, ni socializar, pues su condición no lo dejaba y él no lo sabía. Solo le hacía caso a él.