[OM]
El juicio comenzó tranquilo, las autoridades mayores como jueces estaban en sus respectivo puestos, a la espera del gran protagonista que estaba a punto de llegar. A cada lado del hombre mayor, se encontraban dos Psiquiatras opinando junto al hombre viejo de bata negra, a la vez que el trío revisaban lotes de hojas con información para llenar.
Pasaron los minutos, cuando dos de los guardias policiales salían coordinados a las afueras de la oficina, en busca del asesino que ya estaba allí.
Los familiares de las víctimas se iban acomodando en las grandes mesas con sillas en su frente, todos con caras largas y varios con posibles ataques de irá, preparados para combatir su odio contra el asesino de iniciales L.K.
Todos hicieron enfoque a la puerta, cuando L.K venía cabeza gacha, esposado y agarrado por ambos policiales de sus brazos, pronto L.K levantó su rostro, viendo su alrededor, más que todo en frente, donde los familiares de cada víctima lo observaban con repudio, el por su parte, le sonreía con amabilidad a cada uno, aumentando a grandes cantidades las ganas de los familiares al querer matarlo quizás. Era un desquiciado.
Lo hicieron sentarse frente al juez preparado para hablar, y los dos guardias a cada lado del asesino, este miraba a los costados , viendo los policiales serios y alertas a que el chico asesino no decidiera escapar en medio del juicio.
Todo estaba en silencio, pronto se escuchó un llanto a lo lejos, L.K giro el rostro con rapidez para ver de quien se trataba. Era la madre de Cassie, una hermosa señora que lo alimentaba como un bebé cada vez que iba a su casa, siempre había sido bueno con ella, aunque varias veces evitaba follarsela ahí mismo en casa cuando la veía sola, cocinando o incluso lavando la ropa, L.K gruñó, antes que los guardias que lo vigilaban le voltearan con fuerza, haciendo que el asesino se removiera de su asiento, pronto alzó su mirada, viendo al hombre viejo de juez observarlo con furia y a sus lados, ambos psiquiatras de blanco, aunque había uno en particular que le había robado el corazón desde la primera vez que lo vio, de hecho, ese hombre había inyectado en su brazo hasta dormirlo, en su rostro se dibujó una perfecta "o" luego de una sonrisa idiota, deseaba a ese hombre desde el primer momento que lo vio, se veía joven, delicioso e incluso podía creer que detrás de todo su dominio psiquiatra, era inocente y puro.
Toda su admiración y deseo por el chico fue interrumpida cuando su voz angelical se hizo presente. Antes que el trío presente adelante, asintieran para dar la primera palabra.
−Linek Karbach, de 21 años, Acusado por la gran cantidad, aproximadamente 30 casos de homicidios cometidos a lo largo de cinco años, entre ellos, violaciones, tortura incluso antes de la muerte de estas víctimas, dentro de esta categoría; desollación, mutilación, degollación y tortura sexual a la fuerza. Todos los cuerpos firmados por sus huellas dactilares e incluso por fluidos encontrados en los cuerpos de las víctimas. −
El joven psiquiatra hablaba por el pequeño micrófono potente, haciendo llegar la información por parlantes a testigos y familiares de las víctimas, ahora, el profesional con respeto se dirigía al público, más que todo, a testigo y familiares de dichas personas. Donde también apoyo con palabras el psiquiatra mayor que se encontraba platicando a través de murmuros con el juez.
−Lamentamos realmente la muerte de estos seres queridos, Linek ha sido diagnosticado con obvios casos de esquizofrenia entre otros problemas mentales que serán descubiertos con un largo periodo de exámenes y pruebas de las cuales yo y mi compañero realizaremos. − El joven psiquiatra, miraba a quien ahora, aclaraba su garganta para hablar.
− Entre todos los del personal hemos dado la propuesta de internar a este hombre fugitivo hasta el fin de su vida en el hospital psiquiátrico, pues las razones son obvias de sus casos y problemas, este hombre nos da a conocer un ente llamado "él" ¿No es así Linek? −
El hombre observó al chico asesino y este asintió devolviendo la mirada. El psiquiatra sonrió ganador, con esa respuesta había dejado más tranquilo a los familiares de las víctimas.
Luego de unos largos minutos nombrando a las víctimas, el juez decidió terminar con el juicio. Tomando su martillo de madera.
− Finalizo este juicio, nombrando completamente culpable a Linek Karbach. Condenado a prisión eterna, cadena perpetua, en el internado psiquiatra bajo las influencias de estos profesionales. El juicio − El viejo juez golpeó la mesa con su martillo − ha terminado.
ESTÁS LEYENDO
Carta de un Enfermo mental enamorado.
RomansaLuego de cinco años escondido en los más rurales lugares, Linek, dependiente de la esquizofrenia es encerrado por cadena perpetua en el hospital psiquiátrico de Países Bajos, donde paga la condena de asesinatos y torturas macabras bajo su enfermedad...