Capítulo 42: Inma

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Os voy a pedir que me perdonéis por mi irresponsabilidad. Me comprometí a hacer un maratón, pero no lo he hecho (ni he tenido tiempo ni me venía la inspiración). Estas Navidades han sido una puta mierda y me he pasado prácticamente todas las vacaciones de hospital en hospital. Como comprenderéis, en el poco tiempo que tenía libre, no tenía ningunas ganas de escribir. Si veo que os gusta, este capítulo cuelgo otro luego ^-^


Cuando el miércoles llegamos a clase, evité cualquier contacto visual con Rubius o Mangel. Gracias a Dios, ellos tampoco había hecho por hablarme en ningún momento. A tercera hora, la profesora nos dijo que íbamos a tener una nueva disposición en la clase. Los grupos de esta vez no me gustaban tanto como los anteriores: nos habían separado a todas mis amigas y a mí. Algo que no sabía si era bueno o malo, fue que me separaron de Rubén también. Necesitaba un tiempo lejos de él, sin embargo, me daba miedo que ya no me volviese a tocar en ninguno más con él.


Al final, la clase quedó de la siguiente manera: Yo estaba con Mangel otra vez, Curri y Vegetta. Era un grupo bastante bueno para trabajar, pero muy aburrido comparado con el anterior. Lorena estaba con Jordi (pobrecita), Rubén otra vez (maldita afortunada) y Miare, no sabía si compadecerme de ella o matarla por estar con Rubius. Melo iba con Paula (esa chica nueva que llegó poco después de la botellona donde la vimos por primera vez, que también es vecina de Jagger), Luzu, JP y Germán. A Amara le había tocado con Raúl, Lanita y Willy (mira tú que bien, a mí me separan del que era mi mejor amigo y me había dado calabazas, y a ella la habían puesto con su novio). Chus era la que más suerte tenía, estaba con su mejor amigo Rush, Jagger, Dalas y Shibi. El último grupo estaba constituido por Pingu, Ismael, Ro y uno nuevo llamado Yoel Ramírez, a quien quería que le dijeran Folagor, vete tú a saber por qué.


En el segundo recreo, Lorena volvió a irse con Folagor. Le había caído muy bien, y era el primer día que se habían hablado. Me daban mucho asco los dos juntos [łø sł€nŧø łør€n@], los dos eran iguales, como hermanos: jugaban Pokemon, les encantaba su Nintendo más incluso que su apariencia... Inma, Amara y yo nos habíamos quedado con Melo y las demás, mientras que estos dos se marginaban. Estaban justo a nuestro lado, pero era como si no salieran de su caparazón de Pikachus everywhere. Y no me parecía que se sintieran solo como amigos. Esperaba que Fran se diera cuenta pronto, era mi amigo, no quería que arruinara su relación con una de mis mejores amigas por un tío nuevo al que no lo conocen ni en su casa. Ese me caía horriblemente mal.


Estaba acabando ya la sexta hora, cuando le hice un gesto a Lorena, el cual significaba que luego le tenía que contar una cosa. Cuando ya la campana sonó, le dije a Inma que tenía que hablar con Lorena de un trabajo de los antiguos grupos, que ahora volvíamos con ella. Cuando estuvimos lejos como para que no nos escuchara nadie, le pregunté si estaba segura de lo que hacía. Ella no lo entendió, así que formulé mejor la pregunta:


-He visto que el tal Yoel y tú ahora sois muy amigos. ¿Estás segura de que estás haciéndolo bien? Te recuerdo que eres novia de Fran y tú vas coqueteando por ahí con el feo ese.

-Primero, no es nada feo. Es más, es muy guapo. ¡Y muy alto! Segundo, claro que sé lo que hago, quiero mucho a Staxx. Si no te importa, vuelvo con mi amiga.


Y, dicho esto, se fue con Inma R. Como Pingu siempre llevaba a Lorena en coche a su casa, se fueron sin esperarnos ni a Amara ni a mí. Tan solo trataba de ayudarla, no tenía por qué ponerse así. Que sí, que vale, que mis "tácticas estratégicas de ninja" para ayudar no me iban nunca bien, pero la intención es lo que cuenta. ¿O no?


Cuando vi a mi rubia amiga bajando las escaleras, me acerqué a ella. Su cara de extrañeza me indicó que quería saber sobre el paradero desconocido de estos seres omnipresentes que acababan de abandonar el edificio.


-Se han ido. Te digo desde ya que Lorena está enfadada conmigo. Le he advertido que más le vale no juntarse mucho con el Yoel ese. Ella, básicamente, me ha dicho que sabe cuidarse solita.

-¿Y qué hacemos?

-Pa k kieres saber eso jaja salu2 -dije (bueno, claramente no podía decirlo tan cual está escrito... Vosotros me entendéis) para hacerla reír. Lo conseguí. Si es que era yo la puta ama.

-Bueno, mejor esperemos a mañana, le gastas una broma y verás como te se soluciona.

-Sí -asentí con la cabeza-. Y si no, que le den por culo -reímos juntas.




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