Sé que tardo mil años en actualizar, pero el curso se está acabando ya y tantos puñeteros exámenes me matan... Para colmo mañana tengo de Hamlet ._. Matadme plz
Me hacía mucha ilusión lo de esta noche. Vendrían mis nuevos amigos y podríamos celebrar el año nuevo todos juntos. ¿No era impresionante?
Mis abuelos este año habían querido ir con mi tía, así que han dejado la casa sola. Les he preguntado y me han dicho que puedo, pero con dos únicas condiciones: nada de alcohol y nada de entrar en la casa, solo para urgencias y acompañados por mí. A ver, mis abuelos lo que tenían era como un campo y una casa muy grande de dos plantas.
Eran algo así como las cuatro de la tarde. Estaba muy nerviosa y no podía concentrarme en nada que me propusiera, así que pensé que tomar una larga ducha relajante era una buena idea. Preparé las cosas y me duché. Sentir el agua caliente era genial. Después, lié mi pelo en una toalla y me miré al espejo. No era muy de maquillarme, pero hoy era un día tan especial que... Bueno, si el corazón me dejaba, claro, me pintaría. Aunque tampoco lo hice tanto, máscara de pestañas, línea fina y labios rojos. No rojo putón, eso ya sí que no. El rojo que me regaló Inma que se parecía mucho al suyo, que es más coño Borgoña. Vete tú a saber, si yo no entendía nada sobre los colores. Se supone que los hombres no saben, pero las mujeres son como un gran catálogo de una tienda de pintura. Pues ahí se equivocan. Excepto Lorena, Amara, Chus, Ro y Lana, ninguna nos interesábamos por la diferencia.
Después de maquillarme un poco, fui con el albornoz hasta mi habitación. Se me había olvidado coger la ropa. En ese pequeño trayecto, por poco no me daba una hipotermia. Me planté delante de mi armario y agarré unos pantalones negros y una chaqueta de cuero negra. Eso lo tenía claro. Lo que no sabía era qué podía ponerme debajo de la chaqueta. Tras mucho pensar me decidí por un chaleco de cachemir celeste que me regalaron hace dos años y que me sigue estando bueno (si no llega a ser un regalo, no lo tendría, porque no es mi estilo). Luego, bajé y me puse unas botas de tacón negras.
Eran las cinco, me aburría mucho y todavía faltaba una hora para irme de mis abuelos, que estaba como a media hora o cuarenta y cinco minutos de aquí. Agarré el teléfono y busqué el contacto de Jagger. Me contestó al segundo tono.
-¿Sí? -me preguntó con su voz grave.
-Me aburro mucho, ¿por qué no vienes a mi casa un rato? Si quieres, te llevo yo.
Me colgó. Vaya, qué bien. Pues nada, llamaría a Chus o a Rush. No me lo cogió Chus, sino su hermana mayor. Ella se estaba arreglando. Rush me dijo que se iba ya a vestir, que luego hablábamos. ¿Qué pasaba? ¿Todo el maldito mundo iba a arreglarse justo ahora o qué?
"Toc, toc" escuché llamar a la puerta principal. Menos mal que tengo el oído fino. Aunque como para no escucharlo, llamaron a lo bestia. Podrían haber tocado al timbre. O mejor no, no fueran a darle con tanta violencia como a la puerta. Abrí y vi a Jagger con unos pantalones negros, una cazadora negra, unas botas también negras y una especie de chilaba corta de muchos colores, como en una fiesta de hace unos meses. No pude aguantarme la risa al verlo.
-Si no me dejas entrar me voy -amenazó él. Le hice un corte de manga y entramos.
Cuando eran ya las seis, mis padres nos llevaron a la casa de mis abuelos. Estando ya allí, me ayudó a preparar algunas cosas: a colocar todas las sillas que tuviésemos en la parte del porche que estuviese techada por si llovía, a encender la chimenea esa rara (como la que ponen de exterior en los bares), a encender la barbacoa (también en la parte techada)... Jagger había sido una ayuda para hacer todo esto. Además, lo habíamos tenido que hacer solos, porque mis padres nos soltaron y se fueron con mis abuelos a la casa de mis tío. Un lío, pero bueno. Habrá que sacrificarse por tener algo bueno. ¿O no?
ESTÁS LEYENDO
Hoy Sé
FanficSe dice que tres son multitud, ¿no? Pues aquí entra en juego todo un instituto. Unos amigos que se dan cuenta de que son gays, un matón que se enamora de una NERD, un chico nuevo que enamora a todas... Una misma historia vista desde el punto de vist...